
Manualidades con niños
Manualidades con plastilina para niños: ¡súper divertidas!
La plastilina es una de las mejores aliadas para trabajar la creatividad y la psicomotricidad fina de los niños. ¡Además, es un material que les encanta! Por eso, os proponemos un montón de manualidades infantiles con plastilina.
Hacer manualidades es, a su vez, una actividad súper divertida y súper educativa. Sobre la primera, ayuda a los niños a paliar el aburrimiento excesivo. Sobre la segunda, les ayuda a trabajar diferentes habilidades blandas, así como a trabajar la educación emocional en cierta manera.
El mundo manualidades es infinito. Como lo es también el material empleado para ellas: se pueden hacer manualidades con rollos de papel higiénico, con papel reciclado, con pintura, con barro… Pero, entre todos los materiales, hay uno que destaca por encima de los demás: la plastilina. Esa amiga blandita que tanto llama la atención a los niños.
Tal y como afirman desde Play-Doh, marca líder en venta de plastilina, es un material perfecto para niños pequeños. Además, de acuerdo a la misma fuente, es perfecta para trabajar diferentes habilidades educativas: “hay muchas oportunidades para practicar el lenguaje y las habilidades sociales. Además, los niños tienen la libertad de explorar y ser curiosos, sin preocuparse por las respuestas correctas e incorrectas”.
Por si esto fuera poco, la marca también afirma que la plastilina es el material perfecto para trabajar el pensamiento imaginativo y, con él, la creatividad, ya que pueden crear ideas originales. Y también ayuda a reforzar las habilidades motoras, fomentando la psicomotricidad fina de dedos y manos y trabajando el desarrollo de la coordinación óculo manual.
En el plano mental, si el niño ve que la creación que ha hecho queda como él quiere. O que avanza en ella, podrá ver reforzada su autoestima y confianza en sí mismo, por lo que estaría trabajando la educación emocional.
Seguro que entre el material necesario para la vuelta al cole, al menos, habrá uno o dos botes de plastilina de diferentes colores. Así que, esta es la oportunidad perfecta para coger esos y otros que tengáis por casa y crear manualidades con ellas sin parar.
Estas manualidades con plastilina para niños les encantarán. Están pensadas para diferentes edades y también tienen diferentes niveles de dificultad. Así que, escoged la que más se adapte al nivel de desarrollo de vuestros hijos y seguid adelante con ellas.
Estamos seguros de que todas las encantarán.

Play-Doh propone un arcoíris super sencillo.
Necesitaréis: plastilina de siete colores diferentes y algo para cortarla.
Primero cortaréis los trozos de igual tamaño de todos los colores.
Luego enrollaréis la plastilina con las manos, alargando cada trozo para convertirlo en tiras largas.
A continuación, pegaréis cada tira larga sobre una cartulina, una sobre otra, en forma de semicírculo. El color que quede más abajo será el más corto.
Si queréis, podéis añadir dos nubes blancas, una a cada lado.
En este vídeo, Dibujos en Acción explica paso a paso cómo hacer una tortuguita. Solo necesitareis plastilina de dos verdes diferentes y un poquito de negro.
Las frutas son otra de las manualidades más demandadas con plastilina. En función de la fruta que queráis hacer, necesitaréis unos colores u otros. En el vídeo, Manualidades con Niños explica a la perfección cómo hacer varias diferentes.
Esta Navidad podéis optar por un árbol diferente: ¡hecho con plastilina! Puede ser del color que más les guste a los niños y podéis adornarlo con una estrella hecha de plastilina y unas cuantas bolitas en el mismo material.
En el vídeo, Ideas en Cinco Minutos lo explica a la perfección.

Esta manualidad, también propuesta por Play-Doh, es un poquito más elaborada.
Necesitaréis cinco colores diferentes de plastilina.
Primero habréis de hacer una bola grande de un color y, a continuación, hundir el pulgar para hacer una cavidad.
Después, tres o cuatro tiras largas del mismo color pegándolas alrededor de la maceta, en la parte alta, baja y centro, para decorarla.
Cuarto: hacéis tres triángulos y los ponéis horizontalmente compartiendo el centro sobre la tierra de la maceta, para que sean las hojas de la flor.
A continuación hay que hacer una bola de tamaño mediano y para ponerla en el centro de la tierra, sobre las hojas. Este será el tallo de la flor.
Amasáis cinco bolas pequeñas de un color que os guste mucho. Luego, plañáis estas bolas y las pegáis de manera horizontal, compartiendo el mismo centro, sobre el tallo. Estos serán los pétalos.
Se acerca Halloween así que podéis empezar a pensar en la decoración. Como esta araña negra muy sencilla de realizar.
Todos los pasos están en el vídeo de arriba de Dibujos en Acción.
Una de las manualidades con plastilina más sencillas es el caracol. ¿Quién de niño no ha hecho uno? Hace falta muy poca explicación para llevarlo a cabo pero, por si acaso, en el vídeo encontraréis el tutorial.
Otro elemento de decoración para este Halloween. ¡Es súper sencillo de realizar!

Para hacer esta manualidad de Play-Doh necesitaréis cuatro colores y dos palillos.
Primero hay que hacer bolas y bolitas de todos los colores. La más grande será el cuerpo de la mariquita. Después, las aplastáis un poco sobre la superficie plana, la parte baja de la bola quedará plana y la parte alta quedará redondeada. En esa parte trazáis una raya por la mitad, no muy profunda y, después, pegáis las bolitas para hacer las manchas características.
Después amasaréis un trozo de plastilina de otro color para forma un cono con punta plana. Será la cabeza.
Para los ojos, habrá que coger bolitas de otro color y pegarlas a cada lado de la cabeza. Enseguida, cogéis dos bolitas aún más pequeñas para hacer las pupilas.
En la parte alta de la cabeza podéis colocar los palillos (pintados de negro) para hacer las antenas.
Los pulpitos reversibles son una de las delicias de todos los niños. Seguro que son muchos los que los tienen en peluche, pero en plastilina son, si cabe, más adorables.
En el vídeo kawaii Art explica cómo se pueden hacer.