Alimentación
Platos divertidos para niños
Llamaremos más la atención de nuestro pequeño gourmet si la comida se presenta de forma divertida. ¡Te damos unos suculentos ejemplos!

El pescado es un alimento excelente para los niños. Aporta casi la misma cantidad de proteinas que la carne y una cantidad mínima de grasas saturadas.

La fruta es el postre o merienda ideal, además de fundamental en el desayuno. Tiene un alto contenido en agua, azúcares (fructosa y sacarosa), ácidos orgánicos, minerales y vitaminas hidrosolubles (A y C), y muy pocas calorías.

La fruta ya hemos visto que es fundamental en la alimentación de toda la familia y es que, además, aporta fitonutrientes (responsables de sus colores y sabores) que ayudan a combatir infecciones.
A partir del primer año de vida conviene que el niño se acostumbre a tomar algo de fruta dos o tres veces al día.

Los fitonutrientes más relevantes de las frutas son los carotenoides, precursores de la vitamina A (con propiedades de antienvejecimiento) y los polifenoles, antioxidantes que contrarrestan la acción tóxica de los metales en el organismo.

La fruta no debe sustituirse por los zumos naturales, ya que se pierden las propiedades de las vitaminas y de la fibra al exprimirlas, sobre todo si no se toman inmediatamente.

Las frutas blandas, como el plátano o la naranja, les resultan muy agradables a los bebés ya que las mastican con facilidad. En el caso de las frutas duras, como la pera o el melocotón, podrán tomarlas si las cortamos en láminas finas que puedan coger con sus manitas.
Los niños mayores de un año, tomarán bien la fruta si se lo ponemos fácil: pelada, cortada, en macedonia, brochetas, incorporada en ensaladas, en batidos, con yogur...

Este año el platito de las uvas para fin de año lo podemos preparar con los niños. ¿Qué figurita haréis vosotros? A nosotros nos ha encantado esta forma tan original tomada de la famosa película "UP" de Disney y Pixar.