
Vuelta al cole
15 trucos fantásticos para hacer la vida de los padres más sencilla
Aunque tanto a los niños como a los papis la vuelta al cole nos cuesta un poco, todo es mucho más sencillo con unos cuantos trucos para organizarse bien.
La vuelta al cole siempre se hace un poquito cuesta arriba. Los pequeños han pasado dos meses de descanso, sin hacer absolutamente nada y sin horarios estrictos que tener que cumplir y volver a adaptarse a la rutina puede ser un poco complicado.
Para evitar que lo sea, lo mejor es que cuenten con nuestro apoyo y que nosotros, a su vez, tengamos bajo la manga unos cuantos trucos para que no se den cuenta de que el nuevo horario ha comenzado.
La vuelta a la rutina tras las vacaciones escolares puede provocar varios síntomas de estrés y ansiedad que dificultan la incorporación. Es el conocido “síndrome post-vacacional”. Aunque a menudo está asociado a la época adulta, es cierto que en la época infantil también se puede sufrir. Para evitarlo, basta que tener paciencia y saber organizarse bien.
Dos de las cuestiones que más nos traen de cabeza son la organización y el ahorro de dinero a la hora de comprar todo lo necesario para la vuelta a las clases. En cuanto a la primera cuestión, lo primordial es saber ahorrar todo el tiempo posible y, además, establecer un horario de rutinas.
Por otro lado, el ahorro de dinero es una cuestión bastante fácil de llevar a cabo. Si establecemos una lista de cosas primordiales que tenemos que comprar, evitaremos hacer gastos innecesarios. En la lista no pueden faltar los libros de texto, la ropa, los zapatos y todo el material que nos indiquen en la lista durante los primeros días de curso.
Además de todo esto, existen algunos tips que podemos utilizar durante todo el curso con los que ayudaremos a nuestros pequeños a que aprendan a organizarse por sí mismos y a que vuelvan al cole con todas las ganas del mundo.
Hemos seleccionado un montón de ellos que facilitarán la vida a los niños y a nosotros nos ayudarán a ahorrar un montón de tiempo a la hora de planificar toda la semana lectiva durante todo el curso. Recuerda: si comienzas a hacer algo y consigues hacerlo día tras día durante 21 días seguidos, se convertirá en un hábito. ¡No os costará nada llevarlos a cabo!

Todo será mucho más sencillos si los pequeños tienen un pequeño rincón en casa dedicado especialmente a todo su material escolar: unas perchas para las mochilas, unas estanterías especialmente diseñadas para ello con baldas para las carpetas y otras con lapiceros para ordenar todos sus lápìces,...

Aunque puede parecer la típica pulsera que todos los niños lucen en sus muñecas durante el verano, es cierto que estas pulseras pueden sacar de un apuro. Si el niño se pierde por alguna razón al ir o al volver del cole, si lucen en su muñeca una pulsera con su nombre y otra con el número de teléfono de mamá o papá, podremos encontrarlo en un plis plas.

Una de las cosas que más tiempo nos quita es organizar la ropa día tras día. Si dedicamos un ratito el domingo junto a los pequeños (recuerda que a partir de los cinco años comienza a ser bueno que le dejemos elegir su ropa) te evitarás muchos dolores de cabeza cada día.

Si ya sabe escribir enseñale al pequeño a usarla. Si les enseñamos a una edad temprana, cuando sean mayores serán mucho más organizados y será su fiel compañera durante el curso escolar. También podemos anirmales a que la decoren a su manera.

Una pared en la que estén escritas bien grandes las tareas que tienen que hacer cada día y a qué hora deben realizar cada una.

Parecida a la anterior pero esta vez ideada para organizar las tareas de toda la familia.

Con el que facilitemos al niño todo lo que tiene que hacer cada hora una vez que salga del colegio y las rutinas.

Es una de las claves principales para que el niño obtenga un rendimiento perfecto en su etapa escolar. Establecer un espacio de estudio fijo en casa donde todo esté bien ordenado y limpio.

Es otra de las tareas que más tiempo nos quita: preparar cada mañana el desayuno. Si lo dejamos hecho después de cenar cada noche, podremos ahorrar unos cuantos minutos para invertir en otra cosa.

Podemos crear una playlist con música que lleven el ritmo perfecto para cada tarea que tengan que realizar los pequeños. Este truco es muy bueno para la mañana: si los levantamos con música y los invitamos a que desayunen, se vistan y cojan la mochila al ritmo de sus canciones preferidas, todo será mucho más ameno.

Muchas veces los niños no comen bien la merienda para el recreo o para después de clases porque lo que les hemos preparado no les gusta. Por ello, algo muy bueno es que les dejemos crear una lista con sus alimentos favoritos y saludables) y preparar la merienda en función de ella.

También buena idea congelar el pan cortado para los cinco bocadillos de la semana. Así, si lo sacamos la noche de antes, podremos prepararlo muy rápido sin necesidad de tener que bajar a por pan cada día antes de llevar a los niños al cole.
Otra opción es congelar cinco bocadillos enteros, y sacar uno cada noche.

Así l otendrán asociado y no les costará buscar o guardar los apuntes de cada una.

Después de los deberes y acabar con la rutina, llega el ocio. Ver la tele, estar un rato en internet o jugar con mamá y papá. Eso sí, si tenemos un planning con cada actividad y sus horas, evitaremos rabietas.

A parte de dejar que el pequeño elija qué merienda prefiere para la hora del cole, algo muy sencillo y que nos ahorrará bastante tiempo es comprarlo todo de golpe e irlo guardndo y dosificando para cada día.