Cómo detectar si tu hijo es hiperactivo
Se está produciendo un evidente sobrediagnóstico del trastorno, así como una deficitaria e insuficiente evaluación por parte de algunos profesores.
Muchos niños que no son capaces de estar atentos en clase o son muy inquietos en casa son rápidamente etiquetados como hiperactivos, sin haber realizado una evaluación ni haber tenido en cuenta las causas que provocan esa falta de atención.
Según explica el psicólogo Rafael Guerrero, en el TDAH se habla de tres síntomas nucleares o componentes básicos, aunque cada niño los manifiesta de diferente manera y en diferente proporción:
- Déficit de atención: dificultad para prestar atención a los estímulos relevantes del ambiente e inhibir los estímulos que son irrelevantes en un momento determinado.
- Hiperactividad: necesidad de estar en continuo movimiento e imposibilidad de controlar dicha conducta hiperactiva. El exceso de movimiento que tienen es una manera de autorregularse de forma no consciente.
- Impulsividad: el niño con TDAH se puede mostrar impulsivo tanto a la hora de pensar (impulsividad cognitiva) como de hacer las cosas (impulsividad conductual).
La evaluación del TDAH, como la de cualquier otro trastorno, debe ser realizada por una persona especializada y con experiencia en el trastorno y en las diferentes pruebas de evaluación que se han de aplicar.
El diagnóstico de TDAH es clínico, con lo que no existe una única prueba que al administrarla nos permita comprobar si el niño «da positivo» o «da negativo». No existe para el TDAH una prueba que haga las veces de «alcoholímetro» de este trastorno.
La evaluación se suele hacer en cuanto se detectan los primeros síntomas, pero esto no suele ser hasta los primeros cursos de la etapa de primaria, sobre los seis o siete años. Existen algunas excepciones en los últimos cursos de la etapa de educación infantil.
Una buena evaluación debe incluir entrevistas, observaciones y pruebas estandarizadas en al menos los tres pilares siguientes:
- El niño en cuestión
- El ámbito familiar (padres, hermanos y otros familiares significativos).
- El ámbito escolar (tutor/a y profesores).
Fuente: Trastorno por déficit de atención con hiperactividad (Ed. Libros Cúpula). Rafael Guerrero