Ecografías trimestrales: ¿cuándo se hacen y qué información aportan?
En el embarazo se hace al menos una ecografía por trimestre. Te contamos cuándo se hacen y qué información dan sobre tu futuro hijo.
La ecografía se vuelto imprescindible en el seguimiento del embarazo y desde su invención, en 1970, no han dejado de evolucionar. Hoy existen ecografías 2D, 3D y 4D, y cada una tiene su función.
Cuando el embarazo transcurre con normalidad, la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) aconseja realizar tres ecografías en el embarazo, una por trimestre. Pero es posible que, aunque todo vaya bien, te hagan una ya en las semana 7-8 para confirmar el embarazo y alguna más dependiendo del ginecólogo que lleve tu embarazo.
La primera ecografía
Se realiza entre las semanas 11-14ª. Sirve para saber si viene más de un bebé, comprobar su vitalidad (escuchando su latido) y establecer su edad (determinando su longitud desde la coronilla a las nalgas).
Es importante para establecer la fecha probable de parto. También se mide el pliegue de la nuca del embrión para descartar la probabilidad de una anomalía cromosómica.
La ecografía del segundo trimestre
Se hace en las semanas 18-22ª. Es fundamental para realizar un estudio exhaustivo de los órganos del feto y comprobar si existe alguna malformación. Se estudia el cerebro, el corazón, los pulmones. También mide el diámetro del feto para constatar que crece bien y se observa la columna vertebral (para descartar la espina bífida).
La ecografía del tercer trimestre
Se hace en las semanas 32-36ª. Es muy útil de cara al parto, pues se observa la presentación del feto dentro del útero y la ubicación de la placenta y se mide el perímetro de su cabeza y de la pelvis de la madre. También sirve para comprobar si el crecimiento del feto es adecuado, si hay suficiente líquido amniótico, descartar una posible vuelta de cordón…