Ser Padres

Mi hija es alérgica, ¿le perjudica que yo coma huevo?

Me gustaría saber si las proteínas del huevo que yo tomo pasan a la leche. Mi hija, de 13 meses, tiene piel atópica, y el otro día le di huevo y el eccema se le agravó, aunque otras veces había tomado huevo y no había pasado nada. De momento, no le doy huevo pero no sé si lo puedo tomar yo, ya que aún toma pecho.

En algunos casos, el bebé tiene síntomas de alergia provocados por algo que come su madre durante la lactancia. Puede ser la leche de vaca, o el huevo, u otras cosas. Pero es raro, y más raro todavía a los 13 meses, pues normalmente el problema se soluciona antes.

Cuando en un bebé pequeño existe la sospecha de que es alérgico a algo que la madre comió, es necesario hacer la prueba de que la madre no tome ni gota, pero nada de nada (si no, puede que no salga de dudas) durante siete o diez días. Si el niño sigue igual, es que no era ese el problema, y la madre puede volver a comer de todo. Si el niño parece mejorar, igualmente la madre tiene que tomar de nuevo el alimento sospechoso (y no solo unas gotas, sino bastante cantidad, para salir de dudas) para comprobar que el niño vuelve a empeorar y vuelve a mejorar al volver a cambiar la dieta. Porque los posibles síntomas de alergia (en este caso, el eccema) normalmente van cambiando de intensidad con el tiempo, a veces mejor, a veces peor, y es fácil que el niño mejore por pura casualidad y luego la madre se pase meses haciendo una dieta incómoda e innecesaria.

Cuando el niño no reacciona a lo que come la madre, la madre puede comer de todo, aunque el niño sea alérgico. Lo normal es que las proteínas del alimento se destruyan el el tubo digestivo de la madre y por tanto no afecten al bebé; por eso es raro que ocurra.

¿Está tu hija está mal ahora? Es decir, si tú dejas de tomar huevo y ella mejora, ¿se notaría esa hipotética mejora? Porque si ya de entrada no hay nada que mejorar, no sirve de nada hacer la prueba. Si la niña está mal, puedes probar a estar una semana o diez días sin comer huevo, a ver qué ocurre, y luego la prueba de reintroducción, como he explicado.

Es fácil sugestionarse uno mismo con síntomas tan poco claros. No es como la fiebre, que se mide con un termómetro, sino "Me parece que tiene el eccema un poco peor, la caca un poco más suelta, parece que ha dormido peor...". Por eso es bueno pedir ayuda al padre. Es decir, tú tomas o no tomas el huevo a escondidas. Y tu marido, sin saber qué días has tomado huevo y qué días no, que vaya apuntando en un papel cómo ve él el eccema de la niña o cualquier otro posible síntoma. Y al final del experimento podréis ver si coincide o no coincide.

tracking