Capacidad reproductiva
¿Quieres ser mamá? 12 claves de la fertilidad femenina
Si estás pensando en tener un bebé seguro que se te han pasado por la cabeza muchas preguntas vinculadas al embarazo, a la ovulación y a tu capacidad reproductiva. ¿Quieres saber las respuestas? Te las contamos.
Es cierto que la edad es un obstáculo en la capacidad reproductiva femenina porque el paso de los años está ligado al envejecimiento de los óvulos. Sin embargo, y como ocurre con casi todo, ese envejecimiento no es el mismo en ninguna mujer. Así que nuestro primer consejo es que no te dejes llevar por generalidades. Seguro que conoces a más de una mujer que ha tardado en quedarse embarazada siendo veinteañera y a más de una que no ha tenido que esperar mucho pese a haber superado los 40.
Y es que cada mujer es distinta y debe informarse del estado de su propia fertilidad. ¿Sabes cómo hacerlo? Mediante un estudio médico que consiste en una analítica hormonal y una ecografía vaginal. Con estos datos un profesional podrá decirte cuál es el estado de tu reserva ovárica.
Según explica Fulvia Mancini, ginecóloga y directora médica de Clínicas Eva, es en este punto donde debe comenzar una política de información a la mujer para explicarle en qué consiste este estudio y cómo puede preservar su fertilidad. De esta forma “evitará muchos diagnósticos de infertilidad tardíos y desoladores”. Según ella “la fertilidad se puede prevenir en muchos casos con información solvente”.
Por esa razón, con ayuda de esta experta en reproducción asistida, hemos recopilado los datos imprescindibles que toda mujer debe conocer sobre su material genético, o dicho de otra forma, sobre sus óvulos.
Deja de hacerte falsas ideas sobre tu capacidad reproductiva y maneja información útil y real. No dejes que las experiencias ajenas condicionen tu día a día ni tus proyectos. Y sobre todo no te compares. Ninguna mujer es igual a otra ni por fuera ni por dentro, por lo que lo que a una le pasa no le tiene que pasar a las demás y, al contrario, lo que una no consigue, no tiene por qué no conseguirlo el resto.
Descubre los datos reales de tu capacidad reproductiva y actúa en consecuencia. Si quieres tener toda la info para conocerlos, te invitamos a seguir leyendo lo que desde SerPadres hemos preparado para ti:

El primer paso para conocer el estado de tu fertilidad es el Estudio Básico de Fertilidad, que consiste en una ecografía transvaginal en la que se medirá tu reserva ovárica, es decir, la cantidad de óvulos que te quedan. Para ello se recuentan los folículos antrales, que son las bolsas que contienen los óvulos.

Este recuento de folículos antrales permite conocer las probabilidades de que te quedes embarazada. Recuerda que en una mujer de 35 años es normal tener unos 12 folículos, pero en una de 40 años ya se considera una buena reserva contar con 6 folículos.

Los ovocitos producen una hormona que se llama Antimülleriana. Esta hormona es la que más representa la reserva ovárica: una AMH por debajo de 1.1 ng/ml se considera una reserva baja en una mujer de 35 años pero sería muy buena en una de 40 años.

Otras dos hormonas que se valoran son la FSH y el Estradiol: hasta los 40 años la FSH tiene que estar por debajo de 10 UI y el estradiol <50 pg/ml. Por encima de los 40 años es normal que la FSH sea más elevada y que los niveles de estradiol sean más fluctuantes.

Gracias al cruce de estos datos hormonales y vaginales se puede conocer si una mujer joven puede tener problemas de fertilidad en ese momento o en un futuro inmediato. De ser así, la causa puede ser hereditaria o debida a factores ambientales.

La menopausia precoz, la escasez de óvulos y la retirada de la regla en edades tempranas se deben a la herencia genética. Un ejemplo de factor ambiental sería el estrés que inhibe la producción de la hormona que desencadena la ovulación, la antes citada Antimülleriana. Hay otras causas por las que se producen pocos óvulos y están relacionadas, entre otras, enfermedades como la endometriosis, cirugías de ovario y tratamientos oncológicos como la quimioterapia y radioterapia. También con el tabaquismo.

El embarazo a los 40 no es imposible, depende de la reserva ovárica y de la calidad de esos óvulos. Es preciso saber, no obstante, que a partir de los 42 años más del 75% de los óvulos están alterados cromosómicamente.

La tasa de embarazo de la mujer según su edad cae irremediablemente. Con 25 años, hay un 25% de opciones por ciclo de lograrlo de manera natural. Con 30, un 22%. Con 35, un 12%, con 40, un 5%. Y con 45, un 1%.

No existe una indicación precisa para mejorar la calidad de los óvulos, aunque es cierto que llevar una vida sana y equilibrada, así como evitar hábitos nocivos puede ser de gran ayuda a la hora de buscar el embarazo. Se desaconseja el alcohol, el tabaco y el deporte extremo.

La vitrificación de óvulos es el tratamiento que permite congelar los óvulos para evitar su envejecimiento y así poder ser madre en el futuro, en el momento que la mujer decida, con las mejores garantías de salud para ella y para el futuro bebé. La edad ideal para llevar a cabo la vitrificación coincide con la de máxima fertilidad femenina. Hablamos desde los 20 a los 35 años.

No existe una edad máxima para la implantación futura, pero si recomendaciones de carácter ético-sanitario al respecto. Existe un consenso médico que fija el límite en los 50 años para ser madre mediante reproducción asistida.

10 es el número de ovocitos que se considera óptimo para asegurar una futura maternidad. Tener menos de 10 óvulos no significa no poder quedarse embarazada, sólo reducir las posibilidades.