Ser Padres

Más de 25 productos prácticos para viajar en verano con bebés y niños

¡Las vacaciones escolares ya están aquí! Eso significa que los peques van a tener un descanso de las obligaciones del cole y, por tanto, mucho tiempo libre. Hacemos un repaso de varias marcas de puericultura para haceros la vida más sencilla este verano.

Ana Palicio

Para ellos son tres meses de descanso, un lujo que difícilmente pueden disfrutar hoy en día los mayores. Y una circunstancia que para muchas familias supone buscar cuidadores, cambiar horarios y, sobre todo, ajustar la vida familiar a nuevas rutinas. Cuando se trata de niños, ya se sabe: no es tan fácil.

Queremos que la época estival se convierta en un momento inolvidable. Así que evitemos que los viajes con el bebé o los viajes con los niños, con sus largas esperas en el aeropuerto para coger el avión o el tren o las horas interminables en el coche, no se conviertan en algo estresanteRita Alonso, fundadora de Dommuss, la app para organizarte en familia, nos da 4 consejos para conseguirlo.

1. Nuevo reparto de tareas en casa: Ahora que los niños tienen tiempo, es un buen momento para que ayuden más en casa a través de diferentes tareas domésticas. Pueden hacer su cama por la mañana, ayudar a poner la mesa, a doblar la ropa, etc. La experta recomienda establecer un calendario con tareas y responsabilidades y, para motivarles, si cumplen todos sus cometidos, ofrecerles un premio o recompensa.

2. Comidas y cenas: La clave es la organización. Rita Alonso recomienda diseñar el menú de la semana con antelación para dejar la compra hecha y no tener que ir improvisando cada día. Ahorra mucho tiempo y da tranquilidad. En su aplicación, Dommuss, existe un módulo para apuntar el menú semanal y al que pueden acceder todos los miembros de la familia.

3. Plantea un horario de actividades: En los centros escolares se alternan actividades entre las horas de estudio. Siguiendo este modelo, se puede repartir el tiempo diario para que no se aburran: un rato para ayudar con las tareas de casa, después otro para pintar y hacer manualidades y, si se prefiere, algo de carácter más físico. Tras la comida, cuando están más cansados es el momento de dejarles ese tiempo para sus videojuegos o para ver los dibujos. A última hora, con menos calor, el paseo familiar siempre es un gran plan.

4. Aprovechar para aprender: Las actividades que hagan pueden estar enfocados a sus aficiones: al fútbol, la natación, la música, la pintura. Asimismo, padres y cuidadores pueden hacer girar los pasatiempos que elijan en torno a una temática que les interese: el océano, los animales, la selva... O ¿por qué no? Apostar por los idiomas y que los juegos que se realicen, por ejemplo, en inglés.

Estos son los productos más prácticos para las vacaciones con el bebé o niños, ¡serán realmente útiles!

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