Una mascota para el bebé

Desde el punto de vista de la salud, el perro no transmite enfermedades si se toman unas medidas higiénicas, se le vacuna y desparasita regularmente. Pero antes de tomar una decisión hay que sopesar al menos dos cosas: por un lado que un golden retriver es un perro grande que necesita salir a la calle y correr, y si no se le hace mucho caso, se entristece con facilidad.

Por otro lado, por muy noble que sea y por muy inofensivos que sean sus modales, un perro es un peligro para un bebé y un niño pequeño, y no se puede dejar a los dos solos ni un momento, porque si el niño le molesta cuando está dormido o comiendo, puede reaccionar de forma violenta.

Los niños hacia los cuatro años comienzan a entender cómo deben relacionarse con el perro, entonces tener un perro por mascota es menos arriesgado.