Juegos fáciles para bebés: ideas que estimulan su desarrollo
Aunque no es falso eso de que los recién nacidos se pasan el día durmiendo y comiendo, desde muy pequeños sí que van teniendo ratitos en los que están despiertos y atentos, y esos momentos son ideales para estimularles a través del juego.
Que los bebés atiendan durante un período muy corto de tiempo a la misma actividad y que se pasen buena parte del día comiendo y durmiendo no implica que no podamos (y debamos) jugar con ellos. Es fundamental estimularles a través del juego, que además es también una magnífica forma de fortalecer el vínculo personal con ellos.
Hay muchísimos juegos que se pueden hacer con los recién nacidos pese a las limitaciones que conlleva su escasa movilidad y su todavía temprano desarrollo. Estas son algunas de las divertidas y de las más eficaces precisamente para potenciar su evolución.
Hacer pompas de jabón
Ponerles bocarriba o en la hamaca, en posición cómoda, y jugar con ellos a hacer pompas de jabón les suele sacar una sonrisa de oreja a oreja. Se estimulan tanto con este juego que se suelen activar muchísimo mientras las siguen con su vista. Dependiendo de la edad, podrá ir detrás de ellas también con sus manos o no, pero en cualquier caso se lo pasarán en grande.
La hora del baño
En los primeros meses de vida el baño es rápido y ni siquiera es recomendable hacerlo a diario, pero se puede aprovechar cada ratito en la bañera para estimularles. Siempre en un entorno muy seguro y vigilado, por supuesto. Lo que más les divierte en este sentido es que dejemos caer agua a su alrededor con una esponja, jarra o cualquier otro objeto que haga cascadas. Y a medida que se sostienen erguidos, se puede potenciar mucho el juego con ellos en el agua ya con un grado mayor de autonomía.
Cesto sensorial
Se ha puesto muy de moda esta actividad con bebés que lo cierto es que es divertida para ellos y muy estimulante. Tan solo necesitas cajas, cestas o botes para llenarlos con elementos de distintas texturas, olores, formas y colores. Deben ser seguras, de manera que el niño no pueda llevárselas a la boca si ya es capaz de utilizar sus manos para coger objetos. Puedes meter objetos, comida, cintas, papeles… Algunas puedes dejarlas abiertas para que toque y otras cerradas, para que haga ruido.
Gimnasio
Es un clásico del universo bebé pero no por ello menos interesante. En el mercado disponéis de muchos modelos y también lo podéis fabricar de forma casera ya que basta con tener una manta confortable y limpia en la que colocar al pequeño y rodearla de estímulos seguros para ellos, tanto alrededor como por encima, para que su vista se active.
Juegos musicales
Cuanta más música, más activos se mostrarán, especialmente si se acostumbran a ella desde pequeños. Probad, por ejemplo, a hacer sonar música clásica un ratito al día mientras están despiertos y relajados, ya sea en vuestros brazos o en la hamaca. Veréis sus reacciones y podréis interactuar con ellos. Id cambiado de estilos y piezas musicales para que su oído no se acostumbre siempre a lo mismo.