Despertares nocturnos del bebé, ¿cómo actuar?
Todos los bebés se despiertan por la noche (los adultos también lo hacemos). El problema es que muchos no saben dormirse después. ¿Cómo ayudarles?
Todos los niños se despiertan por la noche, aproximadamente cada vez que cambian de ciclo de sueño (entre cinco y siete veces por la noche). La diferencia entre los que reclaman a sus padres en estos despertares y los que no lo hacen, es que los primeros no saben volver a dormirse. Esto suele deberse a que cuando se despiertan no encuentran las mismas circunstancias que había cuando se durmieron. Si el bebé se durmió succionando el pecho, necesitará succionar cuando despierte. Si la luz estaba encendida y cuando despierta está apagada, se asustará...
El niño debe sentir seguridad
Hay que establecer unas rutinas de sueño
El sueño siempre debe ser un placer, nunca un castigo.
El sueño debería ser una rutina más, algo previsible en su vida. Para lograrlo, conviene usar elementos externos que el bebé asocie a la acción de dormir.
A la hora de ir a la cama es importante realizar un ritual de sueño con el pequeño: baño, cuento, y a la cuna. Las rutinas le hacen sentirse seguro y le ayudan a conciliar el sueño.
Si el bebé tarda en dormirse, quédate cerca y háblale para tranquilizarlo.
Lo ideal es tranquilizarlo sin sacarle de la cuna, así el bebé sabrá que puede contar contigo cuando tiene problemas, pero que debe dormirse solo. Pero esto no es una norma rígida, a veces los bebés lloran porque se encuentran mal, les duele algo. Fíate de tu instinto de madre.
Gonzalo Pin es pediatra experto en sueño infantil.