Consejos para un gateo seguro por casa
Los niños necesitan moverse, espacio para explorar... pero en una casa existen numerosas fuentes de peligro.
Un truco: recorre las habitaciones gateando para ver los posibles peligros.
- Coloca cierres de seguridad en puertas y cajones y protectores en las esquinas de los muebles.
- La cocina y el baño son los lugares más peligrosos. Para evitar que pueda acceder a productos de limpieza y medicamentos, lo mejor es guardarlos en muebles altos.
- En su habitación hay que evitar tener los juguetes en bolsas de plástico (por el riesgo de asfixia) y quitar de su alcance las lámparas de sobremesa.
- Las fuentes de calor, como la calefacción, no deben colocarse cerca del niño si no tienen una pantalla protectora. Tendrían que situarse lo más alto posible y desconectarse cuando no se usen.
- Es mejor poner visillos cortos para que el niño no pueda tirar de ellos.
- Coloca un protector de fuegos y mandos en el mueble de la cocina. Las cerillas y encendedores deben estar en un lugar inaccesible.
- Los cierres de seguridad en los armarios –de los productos de limpieza, aparatos eléctricos, cubo de la basura–, así como en la nevera, el horno y los cajones son muy útiles. Los enseres cortantes siempre deben estar lejos del alcance de los pequeños o en cajones seguros.
- Las ventanas llevarán un cierre de seguridad. Y no coloques sillas o mesas, y menos la cuna, junto a la ventana.
- Usa protectores en los enchufes de toda la casa.
- Evita colocar alimentos o bebidas calientes en el borde de la mesa o encimeras.
- Las sartenes tendrán el mango hacia la pared; además, usa mejor los fogones posteriores para cocinar.
- Asegura las puertas cerrándolas si no quieres que el bebé entre en determinadas estancias.
- Pon vallas de seguridad en las escaleras.
- Mantén la tapa del inodoro y bidé bajada.