Los beneficios de la lactancia materna en bebés prematuros
La leche materna es el mejor alimento que un bebé podría recibir. Y, como manifiesta la Organización Mundial de la Salud, debería convertirse en el alimento exclusivo durante al menos los 6 primeros meses de vida. En el caso de bebés prematuros, sus beneficios son aún mayores, ya que les proporciona todos aquellos nutrientes necesarios para seguir adelante.
Es normal que cualquier mujer espere que su embarazo transcurra con normalidad, y que su bebé nazca sano tras una gestación normal de nueve meses. Sin embargo, en ocasiones esto no ocurre así, y el bebé llega antes de tiempo. Es cuando el pequeño nace prematuramente. ¿Sabías que la lactancia materna es sumamente beneficiosa para ellos?.
La duración normal de un embarazo se sitúa entre las 37 y las 42 semanas, contando desde el primer día de la última regla. Así, si el pequeño nace antes de las 37 semanas de gestación se considera que es un bebé prematuro. Se estima que, en nuestro país, cerca de un 12% de los bebés son prematuros.
Si esto ocurre, es posible que su cuerpo aún no esté lo suficientemente formado como para poder sobrevivir fuera del vientre materno. Por ejemplo, es posible que pueda sufrir problemas respiratorios, infecciones o problemas alimentarios. Por este motivo, debe quedarse en la incubadora durante un período de tiempo determinado, durante el cual recibe una serie de cuidados especiales.
Tener un hijo prematuro puede convertirse en una experiencia muy dura para la mamá y el papá, ya que en lugar del embarazo y el parto que se esperaba (en definitiva, para los que se habían preparado), el escenario en el que se verán envueltos es completamente distinto.
Aún así, pueden estar perfectamente seguros de que los médicos se ocuparán del bebé tanto como lo harían ellos, tanto antes como durante y sobre todo después del nacimiento, y harán todo lo posible para que todo salga bien. De hecho, los avances en neonatología de las últimas décadas han permitido reducir la mortalidad neonatal de manera ciertamente significativa en todos los países desarrollados.
¿Cómo es la lactancia materna con un bebé prematuro?

La lactancia materna en el prematuro
Es fundamental que la mamá permanezca el máximo tiempo posible al lado de su recién nacido prematuro. Una vez el pequeño está estable, es conveniente empezar con el método canguro, que ayuda a que se inicie el vínculo entre la mamá y el bebé, y ayudará a estimular la producción de leche.
Dado que no es posible la lactancia materna como se hace normalmente, es necesario empezar a extraerse la leche en las primeras 6 horas después del parto, y puede ser extraída tanto en casa como en la unidad de neonatología, cerca del bebé, lo que ayuda de forma muy positiva a la hora de aumentar la producción de leche.
¿Cuándo es posible poner al bebé prematuro al pecho?
Como recomiendan muchos expertos, se recomienda hacerlo tan pronto como sea posible. Eso sí, si se trata de un prematuro aún inmaduro es necesario tiempo para ayudarlo a crecer y a desarrollar tanto sus músculos como la coordinación necesaria para poder succionar, tragar y respirar mientras amamanta.
En estos casos, lo más habitual es que al comienzo pueda ser necesaria la administración de la leche materna por un tubito conocido como sonda nasogástrica, el cual es introducido por la nariz con sumo cuidado hasta el estómago. Aún así, es aconsejable mantener el piel con piel todo lo que sea posible.
No obstante, la gran mayoría de los prematuros no suelen tener dificultades de alimentación, por lo que es posible que sean capaces de amamantarse directamente del pecho de su madre desde el nacimiento, una vez están estables.
¿Por qué la leche materna es tan importante para el bebé prematuro?
Debemos tener en cuenta que la leche materna es el alimento básico ideal para cualquier bebé durante al menos los 6 primeros meses de vida, tal y como recomienda la propia Organización Mundial de la Salud (OMS). Y, en el caso del bebé prematuro, esto es aún más importante si cabe.
La leche materna es fundamental para la maduración y el correcto desarrollo de los bebés prematuros, dado que les protege de enfermedades intestinales muy graves así como de infecciones comunes.

Calostro en el prematuro
Incluso se ha demostrado que ayuda a que la estancia en el hospital sea mucho más corta.
Destaca especialmente el calostro, que proporciona una serie de nutrientes y líquidos vitales, que el recién nacido prematuro necesita especialmente durante los primeros días de vida. Además, contiene otras muchas sustancias que ayudan a protegerlo contra las infecciones.