Grietas en el pezón, hongos...
Problemas durante la lactancia
Al dar el pecho pueden surgir algunos problemas como grietas en el pezón , ingurgitación mamaria , conducto bloqueado , hongos o mastitis. Aunque resultan dolorosos y llegan dificultar la lactancia, tienen solución.
Te explicamos por qué aparecen cómo evitarlos y, si llegan a presentarse, cómo solucionarlos.
Grietas en el pezón: ¿Qué son?
Heridas o fisuras muy pequeñas que se van agrandando con el paso de los días. Producen dolor en el pezón durante la toma, pueden llegar a sangrar e incluso infectarse si no se curan a tiempo.
Por qué aparecen
- Al mamar, el bebé coge solo la punta del pezón y no toda la aureola.
- El niño tiene dificultades para succionar por un frenillo corto o por el uso del chupete o tetinas.
- El pecho esté demasiado lleno y aplana el pezón.
- Una higiene inadecuada en el pecho: exceso de lavados, pezones húmedos o abuso de discos de lactancia.
Soluciones
- Adoptar una buena postura al amamantar.
- Ofrecer primero el pezón sano y luego el lastimado o dar tan solo un pecho por cada toma y vaciar el otro a mano.
- Procurar que los pezones estén siempre secos (se puede usar el secador de pelo en posición de aire frío).
- Los discos de lactancia se desaconsejan porque mantienen la humedad y maceran la herida. Para que el pezón dañado no roce la ropa se puede poner un colador sin mango entre el pecho y el sujetador.
- Las pomadas antigrietas no son muy eficaces y además deben retirase antes de poner al bebé al pecho para que no las ingiera. Es mejor aplicarse una crema a base de lanolina purificada que no perjudica al bebé.
- Alivia aplicarse la propia leche materna sobre el pezón dañado y dejarlo secar al aire.
Ingurgitación mamaria
Qué es
La congestión de los pechos por una acumulación excesiva de leche en los conductos lácteos y líquido en los tejidos que los rodean. Suele aparecer a los tres o cuatro días del parto, pero se puede producir en cualquier momento de la lactancia. El pecho está brillante, edematoso,caliente, doloroso y en ocasiones enrojecido. Al bebé le cuesta coger el pezón y la leche no fluye o lo hace con dificultad.
Por qué aparece
- Porque el pecho no se ha vaciado correctamente o porque el bebé no ha succionado bien o ha estado mucho tiempo sin mamar.
- El uso de un sujetador muy apretado puede oprimir los conductos y dificultar la salida de la leche.
Soluciones
- Cuidar la postura.
- Vaciar el pecho lo antes posible y amamantar al bebé a menudo.
- No saltarse tomas aunque duela.
- Masajear suavemente el pecho y aplicar calor húmedo antes de amamantar para que la leche fluya mejor. A veces, al dar antes el pecho menos lleno, sale leche del ingurgitado por el estímulo de la succión.
- Si el bebé tiene dificultades para cogerse al pezón, conviene sacarse antes un poco de leche para ablandarlo.
- Si hay dolor, el médico puede recetar un analgésico
Conducto bloqueado
Qué es
Cuando se obstruye un conducto lácteo aparece bulto duro, doloroso y enrojecido en una parte del pecho o una ampollita blanquecina en la punta del pezón.
Por qué aparece
Porque la leche queda retenida en el conducto durante mucho tiempo por una ingurgitación, un vaciado insuficiente, o porque el pecho está demasiado apretado.
Solución
- Cuidar la postura.
- Seguir amamantando. La succión ayuda a desbloquear la obstrucción y facilita el flujo de leche.
- Aplicar las medidas para combatir la ingurgitación cuanto antes para prevenir una mastitis.
- A veces es necesario pinchar la ampolla del pezón (debe hacerlo el médico) para extraer la leche acumulada y eliminar la obstrucción.
- Si no hay mejoría en 24 horas o aparece fiebre y vómitos, hay que acudir al médico para que valore la situación.
Mastitis
Qué es
La mastitis suele aparecer tras una ingurgitación no tratada a tiempo. Los síntomas son muy parecidos a los de la gripe: fiebre, escalofríos, dolores musculares y de cabeza, cansancio y náuseas. El pecho afectado aparece inflamado, caliente, enrojecido y con dolor agudo.
Por qué aparece
- Porque la acumulación de leche, por ingurgitación o por un conducto obstruido, inflama el pecho.
- El estrés, la ansiedad y el cansancio la favorecen.
Soluciones
- Aplicar cuanto antes las medidas para combatir la ingurgitación.
- Meterse en la cama con el bebé y descansar.
- Antiinflamatorios para aliviar el dolor y antibióticos, si hay infección bacteriana.
- Seguir con la lactancia aunque exista infección.
- No abandonar el tratamiento aunque se mejore, porque puede producirse una recaída y provocar mastitis recurrentes.
Hongos
Qué son
La infección por cándidas da al pezón un aspecto rosado y húmedo y produce un dolor agudo (como si se clavasen agujas) que no remite tras la toma, acompañado de quemazón, picor e incluso grietas.
Por qué aparecen
- Los hongos se contagian porque el niño tiene muguet en la boca o a consecuencia de una infección vaginal por cándidas.
- Por tener los pezones húmedos por el roce con pezoneras, sacaleches y discos de lactancia.
- A causa de algunos antibióticos.
Soluciones
- El médico prescribirá una pomada antimicótica. No importa que el bebé la ingiera porque si él también está infectado le curará y si no es así no le perjudica.
- Mantener la zona seca, cambiándose a menudo de sujetador y discos de lactancia, y dejar los pezones al aire con frecuencia.
- Eliminar de la dieta el exceso de azúcar.
- Lavarse las manos después de cambiar al bebé y de ir al baño y antes de darle el pecho.
- A veces es necesario un antimicótico por vía oral (que no es incompatible con la lactancia)
Asesora: Pilar de la Cueva, ginecóloga y experta en lactancia.