Preparar a los niños para una mudanza
Si cambiarse de casa, barrio o ciudad, dejar atrás lo conocido, afrontar nuevas caras, paisajes y rutinas tiene dificultades para nosotros los adultos, cuánto más para los niños.
Por eso, es importante mantener lo más posible los hábitos, horarios y rutinas del niño y avisarle de los cambios que va a vivir en los próximos días.
Los más pequeños pueden volverse llorones y pegajosos, hacerse pipí de nuevo... Hay que tratar de entenderlos y no gritar ni reñir. Una actitud positiva por nuestra parte, saber transmitir entusiasmo y convertir el traslado en una experiencia emocionante facilitarán mucho las cosas. La crisis pasará y el comportamiento del niño volverá a normalizarse.
¿Cómo podemos ayudar a nuestros hijos cuando cambiamos de casa?
Estos son algunos consejos para que los niños se adapten a los cambios que implica una mudanza lo antes posible:
Luciano Montero, psicólogo.