Preeclampsia: síntomas para detectarla en el embarazo
Junto a la eclampsia, la preeclampsia es la causa principal de morbilidad en gestantes y bebés antes de nacer. Estos son los síntomas que pueden alertar de ella en la gestación.
“No tendré más hijos. Me da miedo”, afirmaba la cantante Conchita hace unos meses a La Otra Crónica. ¿El motivo? Los riesgos que supuso en su salud y la de su bebé sufrir preeclampsia durante su embarazo. Una enfermedad que le llevó a estar tres días en coma y no poder vivir en primera persona el nacimiento de su único hijo. Un bebé que, después de nacer prematuro, tuvo que pasar 53 días ingresado en neonatología.
¿Qué es la preeclampsia?
La preeclampsia es una afección que se da en el embarazo y que afecta a entre el 2 y el 10% de las mujeres embarazadas, según cifras de la Organización Mundial de la Salud. La misma fuente argumenta que su prevalencia es siete veces mayor en países en vías de desarrollo que en los desarrollados.
De hecho es, junto al parto prematuro, la principal complicación que puede darse en el embarazo. Y, junto a la eclampsia, es la causa principal de morbilidad y mortalidad en madres y fetos, según la OMS.
Pero, ¿qué es exactamente la preeclampsia? “Se trata de una enfermedad que puede afectar a diferentes órganos como cerebro, hígado o riñón y que se caracteriza por presión alterial alta, a cifras de tensión arterial máxima o mínima”, cuenta en declaraciones a Ser Padres el doctor José María Rodríguez, jefe del Servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital Vithas Madrid Aravaca. En otras palabras, se trata de una elevación anormal y repentina de la tensión arterial, junto a la aparición de proteína en la orina, que puede poner en peligro el desarrollo del bebé y la salud e, incluso, la vida de la madre si no se pilla a tiempo.
De acuerdo al mismo doctor, la incidencia de esta enfermedad gestacional aumenta con el incremento de la edad de la madre, la obesidad, las técnicas de reproducción asistida y en pacientes que sufren otras patologías previas como hipertensión arterial o diabetes.
Pese a que la mayoría de los casos cursan la afección de forma leve, hay un 25% de ellos que se trastorna en algo más severo.
¿Cuáles son los síntomas de la preeclampsia?
La cantante Conchita contó su experiencia también al medio Freeda. En una entrevista para ellos argumentaba que desde el principio del embarazo las cosas no iban bien: vomitaba mucho y, a medida que avanzaba la gestación, sus pies se hinchaban más y más hasta que, finalmente, decidió ir por urgencias donde le detectaron la enfermedad.
Esta afección puede darse en cualquier trimestre del embarazo, aunque lo más habitual es que se diagnostique a partir de la semana 20. “Eso sí, de acuerdo al momento de aparición, existe la preeclampsia precoz (antes de la semana 32), la preeclampsia pretérmino (antes de la semana 37) y la preeclampsia a término (después de la semana 37)”, nos cuenta el doctor Rodríguez.
Independientemente del momento en el que aparezca, los síntomas que nos cuenta el doctor Rodríguez son:
- Alteraciones visuales (visión borrosa, doble, luces…), cefalea, sueño y otras afecciones neurológicas
- Dolor en la zona del estómago, en la boca del estómago o dolor en el lado derecho del costado (a la altura del hígado)
- Insuficiencia de orina
- Náuseas y vómitos excesivos
- Hinchazón excesiva de las manos, la cara o los pies
Además, hay algunas alternaciones que se pueden ver en analítica de sangre que también pueden alertar sobre una preeclampsia:
- Datos de insuficiencia renal
- Plaquetas bajas
- Elevación de las transaminasas hepáticas
Los riesgos para toda la vida de sufrir una preeclampsia
“Cuanto antes se presente y más grave sea, mayores serán los riesgos para la madre y el bebé”, argumenta el doctor Rodríguez. De acuerdo a su criterio, algunas de las complicaciones que puede desencadenar son:
- Crecimiento fetal inadecuado por la dificultad de llegar sangre a la placenta
- Desprendimiento de la placenta de modo prematuro
- Síndrome de HELLP (un síndrome grave y muy peligroso que puede darse en gestantes con plaquetas bajas)
- Eclampsia: convulsiones en una preeclampsia
- Accidente cerebrovascular u otra lesión cerebral si afecta a otros órganos implicados en la hipertensión
Efectivamente, la mayoría de los casos de preeclampsia acaban con una provocación del parto que, en ocasiones, es prematuro. Pero, ahí no acaban los riesgos: “Las consecuencias no acaban con la finalización de la gestación, las mujeres que han sufrido preeclampsia tienen mayor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares durante toda la vida”, afirma el doctor Rodríguez.
¿Se puede prevenir la preeclampsia?
Digamos que no hay una manera específica de prevenir esta enfermedad, pero lo mejor es controlarse mucho para pillarla a tiempo si aparece. ¿Cómo? Llevar un control médico exhaustivo del embarazo desde los inicios (las primeras ecografías son clave para detectarla), tomarse la tensión regularmente sobre todo a partir de la semana 20 o no fumar y llevar una dieta equilibrada.
Además, un nuevo estudio científico publicado en la revista Nature ha descubierto que con tan solo una gota de sangre es posible detectar el riesgo de sufrir preeclampsia antes de que se presente la enfermedad.