
Masajes en pareja para el embarazo
En el embarazo el cuerpo hace un sobreesfuerzo. Por eso, un masaje nos sienta tan bien. Os enseñamos algunas maniobras para relajar las zonas más cansadas.

Siéntate o ponte de rodillas con los brazos apoyados para que la espalda descanse. Tu pareja, desde atrás, masajea suavemente lumbares, pelvis y caderas.

Empezando por las caderas y subiendo hacia el abdomen, con suavidad. El niño suele responder al masaje de papá. Si patalea en exceso, conviene dejarlo.

El cuello, las dorsales y los hombros agradecen mucho un masaje un poco más intenso, pero siempre a tu gusto. Él trabajará a ambos lados de la columna vertebral.

Sentaos uno frente a otro, con tus piernas descansando sobre las de él. Desde los pies y hasta los muslos, él hace un masaje ascendente para reactivar la circulación.

Túmbate y cierra los ojos. Tu pareja masajeará tu cabeza, incluyendo el cuero cabelludo, la cara y las sienes, haciendo pequeños círculos con las yemas de los dedos.