La metamorfosis de Renault
El nuevo logotipo de Renault, diseñado por Gilles Vidal, marca el inicio de una nueva era en la marca, una era de evocación del pasado y ambición por el futuro, de electrificación y de éxito.
Las marcas automovilísticas se están transformando. La electrificación motivará grandes cambios en los vehículos del futuro y en como las compañías afrontan sus negocios. El modelo “fabrico coche, vendo coche” se extinguirá y los servicios de movilidad, las funciones a la carta bajo suscripción y las nuevas formas de adquisición de vehículo, como el leasing o la suscripción, serán la norma. Esta metamorfosis del sector está provocando que las marcas apuesten por renovar su imagen y su identidad corporativa. Renault, por ejemplo, ha apostado por ello, pero en el caso de la firma del rombo es mucho más que un nuevo logotipo, es toda una revolución, o ‘Renaulution’, como les gusta llamarlo en la firma francesa.
Bajo la batuta de un nuevo consejero delegado, Luca de Meo, ex de Seat, el Grupo Renault, que también incluye las marcas Alpine, Lada y Dacia, dará un vuelco a su estrategia y buscará centrarse en crear coches que aporten más valor añadido para depender menos del volumen de ventas. Con un marcado enfoque en la electrificación, con híbridos y eléctricos, de los 24 coches que se lanzarán hasta 2025, 10 serán eléctricos, el Grupo Renault mejorará su mix de producto colocando nuevos vehículos en los sectores clave, es decir, el de los compactos y de los SUV. De hecho, de los cinco nuevos coches del grupo que se producirán en España en los próximos cuatro años, todos híbridos, los cinco serán SUV. Renault quiere coches prácticos, con una buena habitabilidad, un espacio de carga digno de su uso diario y ocasional y eficientes, con motorizaciones que emitan y consuman poco y un precio asequible para la mayoría. El diseño, de la mano de Gilles Vidal, resucitará el espíritu con el que Renault enamoró a muchos.
Y aquí llega el cambio de logotipo, que se estrenó por primera vez en el Renault 5 Prototype, un vehículo que se convierte en un clásico instantáneo. Eléctrico, el Renault 5 Prototype evoca al mítico Renault 5 con un diseño muy parecido. El logotipo parecía ser una reinterpretación del que sus coches lucieron entre 1972 y 1992, pero más minimalista y adaptado al ecosistema digital, aunque muchos achacaban esa enseña a la evocación histórica del prototipo en sí. Nada más lejos de la realidad, el mundo todavía no sabía que estaba viendo el nuevo logotipo de la marca.

Los trazos de Gilles Vidal

Mirar al pasado

El eléctrico asequible

El logotipo que sale

Neoclasicismo
