Ser Padres

Estas son las cosas que nunca deberías hacer por tu hijo

Si queremos criar niños autónomos y autosuficientes, hemos de entender que necesitan su espacio y que no podemos ser sobreprotectores: han de equivocarse para aprender. Nosotros les ayudaremos en el camino, pero hay ciertas cosas que no podemos hacer por ellos.

La crianza y la educación de los niños sigue siendo uno de los principales retos a los que se enfrenta la sociedad en su conjunto y, de forma individual, cada familia que tiene uno en casa. Criar pequeños autónomos, con buena autoestima, con una correcta educación emocional que le permita tener tolerancia a la frustración de mayor y con autosuficiencia para que no nos pida ayuda constantemente son solo algunos de los objetivos que todos tenemos como padres.

Conseguirlo es, ciertamente, arduo complicado. Hemos de tener en cuenta su autonomía, intentar establecer una relación de apego seguro con ellos (y ya nos explicaron diferentes expertos que esto solo podremos conseguirlo si antes nuestros padres la han tenido con nosotros y que, de no ser así, deberemos acudir a terapia para poder establecerla), enfrentarnos a los temidos dos y tres y las rabietas asociadas con la mayor paciencia e inteligencia emocional posible… pero, por encima de todo eso, existe algo que no podemos pasar por alto: no podemos convertirnos ni en padres demasiado permisivos ni en familias demasiado autoritarias con ellos.

El primer caso solo serviría para criar niños egoístas, tiranos y con baja tolerancia a la frustración. El segundo, para criar niños inseguros que necesitasen de nuestra aprobación o, incluso, de la aprobación de pareja y amigos para hacer cualquier cosa, ya que no tendría suficiente poder de decisión sobre sí mismos.

¿Dónde reside, pues, el punto medio para no llegar a una cosa ni a la otra? Pues, efectivamente, entre otros, pasa por poner el punto exacto de ayuda a las cosas que tengan que hacer. No podemos hacerlo todo por nuestros hijos; hay ciertas cosas que hemos de dejarles a ellos. Nuestro papel será el de guía para corregir o indicarle, si se equivocan, por dónde tienen que ir y dónde ha estado el error. Solo así nos aseguraremos de educar niños que se valgan por sí mismos y que tengan autonomía casi desde la cuna.

A continuación os mostramos algunos ejemplos de cosas que no podéis hacer por vuestros hijos. Estamos seguros de que hasta ahora habéis estado cometiendo el error con alguna de ellas.

Pasión por la vida

Más de 45 años acompañando a las familias

Suscríbete por sólo 6 euros al mes y disfruta de nuestra revista

Suscríbete
Suscríbete a Ser Padres
tracking