La OCU advierte del alto valor calórico de los helados para niños
La organización ha elaborado un estudio sobre el contenido de los helados infantiles y ha avisado de su alto contenido calórico.
Después de comparar 50 helados dirigidos especialmente al público infantil, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha llegado a la conclusión de que estos postres infantiles tienen un alto contenido calórico, exceptuando a los de hielo. Esto es que lo que han analizado.
La OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) ha elaborado un nuevo estudio en el que ha comparado 50 helados principalmente dirigidos a niños. Para llevarlo a cabo ha revisado el etiquetado y las características nutricionales para hacer una comparación de su valor calórico.
Los helados que han seleccionado se pueden comprar en supermercados, comercios pequeños y kioscos, y son de marcas variadas, tanto de grandes fabricantes como de las propias cadenas de los supermercados más conocidos.
Normalmente, estos helados son bastante reconocibles por sus colores y sus formas, muchos de ellos utilizan diseños de personajes conocidos por los niños como Peppa Pig o Spiderman, por ejemplo. Además, suelen tener un menor tamaño que los helados de adultos.
Dejando a un lado la clasificación legal que pueda hacerse al respecto, la OCU ha dividido para su estudio los helados analizados en cuatro grupos: los helados de agua, los de leche, los mixtos (tienen sorbete y leche) y los tipo sándwich y conos. Teniendo esto en cuenta han estudiado lo siguiente.
¿Qué han analizado en el estudio?
Para empezar, se han encargado de analizar los ingredientes y como conclusión lo que mayoritariamente aportan son hidratos de carbono y grasas. Y algo que ha llamado la atención es la presencia de aditivos. De los cuales, en muchos casos, aparece su nombre en lugar de sus respectivos códigos “E”. Una clara señal de que cada vez más los consumidores reconocen estos ingredientes y de que los productos pueden ser rechazados debido a ellos.
En cuanto a la grasa, afirman que según el tipo de helado esta varía. Por ejemplo, los que menos grasas contienen son los polos de agua, y los que más, los que son tipo cono o sándwich. Lo que sí tienen en común ambos es su gran cantidad de azúcar.
Por otra parte, considerando que se trata de productos especialmente enfocados a los más pequeños, resulta esperable que en estos helados se encuentren colorantes en abundancia. Gracias a ellos tienen esos característicos colores que tanto llaman la atención a los menores. Algunos de los encontrados son:
- Las clorofilas (E-141)
- Las antocianinas (E-163)
- La curcumina (E-100)
- Los caramelos amónicos (E-150c)
- El caramelo sulfito amónico (E-150d)
No obstante, algunos helados, en pro de minimizar el uso de colorantes, utilizan otros ingredientes para esa función que no están clasificados como aditivos. Por ejemplo: los jugos concentrados, como el de remolacha o el de baya de saúco.
Además de esto, algo que también está presente en casi la totalidad de los helados infantiles analizados por OCU son los aromas. El objetivo de añadirlos es aportar un nuevo aroma o potenciar alguno que ya está en el propio helado. Un ejemplo evidente es el uso de los aromas en los polos, al ser solo una mezcla de agua y azúcar, se les añaden para que tengan sabores característicos como limón, naranja o fresa, entre otros.
Sin embargo, contando con todos los resultados obtenidos, aunque la principal conclusión es que tienen un alto contenido calórico, no significa que este tipo de helados no pueda consumirse. Se trata de productos que se pueden comer de manera ocasional y que si se combinan con una dieta saludable no hay problema por consumirlos.