Un niño, sin vacunar, muere en Italia contagiado de sarampión
Un niño de 6 años que sufría leucemia muere en Italia contagiado de sarampión por sus hermanos, que no estaban vacunados.
La OMS ha advertido del brote de sarampión que está sufriendo Europa en los últimos meses. Y es que, según la Organización Mundial de la Salud, las medidas para prevenir este virus se han relajado en los últimos años. Entre los países que están en punto de mira por el aumento se encuentra Italia, donde se han detectado más de 800 casos en 2016 y 238 en lo que va de 2017.
Una de las últimas víctimas mortales en este país ha sido un niño de 6 años con leucemia quien, al no poder ser vacunado debido a su enfermedad, las complicaciones que le ha desencadenado el virus le ha llevado al peor final. El niño contagió el sarampión de sus hermanos, que tampoco habían sido vacunados por decisión de sus padres.
Aunque el niño tenía un tipo de leucemia con una probabilidad de curación en el 85%, no fue la enfermedad lo que le llevó a la muerte: fueron las complicaciones desencadenadas del virus que contagió de sus hermanos.
Las vacunas son una vía muy efectiva para combatir diferentes enfermedades. Si se aplican conforme a las normas que mandan las autoridades sanitarias, aporta antígenos necesarios al organismo para crear defensas contra la enfermedad.
En la actualidad existen más de veinte vacunas disponibles y, además, la investigación ofrece otras nuevas con mucha esperanza para erradicar algunas enfermedades.
Contra el movimiento antivacuna: obligar por ley
Las cifras del sarampión en hablan por sí solas. Hasta el año 2009 la enfermedad ha estado a punto de erradicarse, pero en los últimos años se ha vuelto a cifras de hace décadas. Hoy en día, el sarampión, a pesar de que hay una vacuna segura y eficaz para prevenirlo, es una de las principales causas de muerte entre los niños pequeños.
Italia ha decidido tomar cartas en el asunto obligando a los padres a vacunar a sus hijos para frenar la oleada antivacunas. Sin duda, uno de los motivos de la obligatoriedad está relacionado con el alarmante aumento de casos de sarampión en ese país.
Los niños deberán cumplir con el calendario de vacunas al día, de lo contrario se les impedirá el ingreso a la guardería o escuela infantil, y se impondrán multas a los padres de hasta 7.500 euros. Incluso se contempla la posibilidad de la pérdida de la custodia de los menores en los casos más graves.