Rotunda respuesta ante los comentarios sexistas por sus seis hijas

Formar una familia es el sueño de (casi) cualquier ser humano. Y por eso tener hijos es algo de lo más bonito que puede pasarnos. Esto es lo que piensan, también, Jeremy y Jessica Martin-Weber, los protagonistas de esta historia.

Esta pareja decidió hace 18 años comenzar a formar una familia en la que los niños fueran los protagonistas. Así, llegó al mundo su primera hija y por la misma razón lo hará la sexta y última: Lucky (aún en camino).

Esta familia tiene una peculiaridad: sus seis hijos son mujeres. Tener seis niñas puede ser uno de los mayores regalos que nos hace la vida, pero, también puede ser cansado si los comentarios sexistas y malintencionados no paran de aparecer por parte de terceras personas. Tanto Jeremy como Jessica afirman que desde que nació su segunda hija tienen que aguantar coletillas como “Pobre padre, me compadezco de ti con tanta mujer en casa”, “¡Qué mal que no haya un varón para continuar con el apellido!” o, peor aún, “Con tanta chica al final vas a terminar yéndote de casa”. Este último, además, delante de las pequeñas.

Según cuentan todos los miembros de la familia, la situación ha llegado a un punto en el que las pequeñas han llegado a disculparse frente a su papá por ser chicas.

Para callar todos los comentarios que aguantan desde hace años, han decidido hacerse una preciosa sesión de fotos en la que descubren al resto del mundo el sexo de su sexto bebé: una pequeña que se llamará Lucky.

En la misma, aparecen haciendo un juego: cada uno lleva apuntado en las manos la combinación de sus cromosomas: XX para ellas y XY para el papá. En una de las fotos se aprecia cómo Jeremy y Jessica juntan sobre la barriguita de ella sus ambas XX para formar la combinación del bebé que esperan.

“Hemos decidido compartir nuestros cromosomas incluyendo los de Lucky porque estamos quemados con los comentarios insensibles que hace la gente con respecto a nuestra familia que “necesita un niño”. Aunque sabemos que no son malintencionados, nuestras niñas están cansadas, frustradas y heridas por la constante presión que, según estas personas, debemos sentir por no tener un hijo varón. Desde la más pequeña (5 años) a la mayor (18 años) estas conversaciones están evitando sentir toda la felicidad por la nueva llegada y hemos decidido revelar el sexo ahora para darnos una semanas para poder centrarnos en el parto y darnos un descanso familiar con respecto a este tema.

Estamos tan emocionados como cualquier familia. En realidad lo sabemos desde hace tiempo y venimos disfrutando preparándonos para su llegada. El sexo de Lucky es solo un pequeño pedazo de información sobre quiénes somos. Ahora mismo estamos centrados en conseguir espacio para el parto, tenerlo todo limpio para la llegada y fomentando nuestra conexión familia, incluyendo a Lucky. (Para darles una dosis de lo que nuestras hijas escuchan en su cara):

Uno de los peores comentarios lo dijeron cuando estábamos embarazados: nos dijeron que a ver si había suerte en conseguir un chico porque dan menos problemas que las chicas. Un cajero de un banco, una vez llamó a Jeremy “pobre” delante de todas las niñas cuando se enteró de que estábamos esperando otra y le dijo que lo sentía por él, cuando estaba rodeado de todas las niñas. Esto llevó a nuestra hija (que entonces tenía nueve años) a disculparse ante su papá por no ser un niño.

La semana pasada, un compañero de clase les dijo que esperaba que el bebé fuera un hermanito porque las hermanas pequeñas molestan… no importa que sea una hermana pequeña. Esto es solo una parte. Hemos oído mucho, mucho más y peor y a menudo. Tal vez estos comentarios son inofensivos para ti, pero hemos oído comentarios como que queremos hacer un negocio de esto o que la gente lo dice sin querer hacer daño. Nosotros hemos querido no callarnos ante los comentarios y honrar a nuestras hijas después de haber sido heridas con las declaraciones. Sabemos que algunas personas pueden pensar que somos dramáticos o demasiado sensibles pero, después de escuchar este tipo de cosas durante 17 años, estamos hartos y, francamente, no encontramos ninguna razón por la que pedir a nuestros hijos que se pongan delante de gente grosera que hace declaraciones inconscientes que, al menos indirectamente, cuestionan su valor. Sí, les digo que estas personas son groseras y trabajamos en dejar que sus palabras no nos afecten, ya que dice más de cómo son ellos que de nosotros. Si crees que estamos siendo ridículos, bien. Realmente no nos importa. Dejad de seguir nuestra página, seguid adelante porque esa es exactamente la clase de cosas de las que estamos hartos y no volveremos a hacer espacio en esta vida para ello.

Así que, aquí está la información sobre Lucky. También sentimos que si vamos a compartir los cromosomas de Lucky, todos teníamos que estar dispuestos a compartir los nuestros.”