Obesidad infantil: dieta Dukan no, dieta del semáforo, en ciertos casos
La madre de un niño de cuatro años con sobrepeso nos ha preguntado si su hijo podría utilizar el método Dukan para adelgazar.
En muy pocas ocasiones está indicado poner a un niño una dieta de adelgazamiento, sobre todo en niños pequeños: es preferible modificar la dieta habitual y los hábitos de vida.
La dieta Dukan es desequilibrada porque tiene un contenido elevado en proteínas. Al seguirla se consiguen pérdidas de peso a corto plazo (en unos seis meses), pero el efecto no persiste en el tiempo y lo peor es que puede provocar alteraciones metabólicas graves para la salud (sobre todo para el sistema cardiovascular).
Muchas sociedades científicas nacionales e internacionales advierten de ese peligro y el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad la incluye dentro de las dietas milagro y fraudulentas.
En los niños que precisen adelgazar mucho se aconseja o bien una dieta baja en calorías con un contenido equilibrado de proteínas, grasas e hidratos de carbono, o bien la dieta del semáforo, en ambos casos, bajo la supervisión del pediatra.
Qué es la dieta del semáforo
En la dieta del semáforo los alimentos se dividen en once categorías, que a su vez se subdividen en tres subgrupos de colores: verde, amarillo y rojo.
El color verde significa “adelante”, come tanto como quieras; el amarillo “precaución”, come cantidades moderadas; y el rojo “detente”, no lo comas.
Tanto esta dieta del semáforo como la baja en calorías se basan en limitar el consumo de alimentos muy calóricos. Si crees que tu hijo necesita perder peso, debes preguntar a su pediatra qué podéis hacer para conseguirlo.