
Consejos para pasar la ITV de tu coche sin problemas
Se acerca el verano y para muchos el momento de pasar la inspección obligatoria antes de irnos de viaje. Aquí te vamos a contar todo lo necesario para pasar la ITV a la primera
La ITV o Inspección Técnica de Vehículos, es ese examen al que tenemos que someter a nuestros coches para comprobar que estén en perfectas condiciones y puedan circular por la vía pública. A todos nos toca experimentar esos nervios previos antes de que te digan si puedes seguir utilizando tu automóvil o si nos tocará volver en otro momento debido a algún problema.
Tener un coche implica tener una serie de gastos fijos, como el seguro, el combustible o la inspección obligatoria, entre otros. Teniendo esto en cuenta, lo mejor que podemos hacer es tratar de mantenerlo en el mejor estado posible. De esta forma, nos podremos ahorrar tener que reparar o cambiar alguna que otra pieza...
En primer lugar, es necesario saber con seguridad cuándo nos toca pasar la ITV. Esto depende de cada coche ya que, si es nuevo, te tocará pasarla una vez haya cumplido cuatro años. En caso de tener entre cuatro y diez años, hay que pasarla cada dos y si tu coche tiene más de diez años, es obligatorio pasar la ITV cada año.
¿Qué documentos debo presentar?
Para poder pasar la ITV hay que mostrar previamente una serie de documentos, como son la Tarjeta de Inspección Técnica del Vehículo, que acredita que el vehículo está homologado para circular por las carreteras de nuestro país y el permiso de circulación. Puedes ir sin cita previa a pasar la ITV, pero es aconsejable llamar previamente para evitar estar esperando mucho tiempo hasta que llegue tu turno.
Una buena idea es acudir a algún taller de confianza que se ocupe de llevar a cabo revisiones preITV. De esta manera sabrás que todo está orden, gracias a las comprobaciones de los profesionales que se encarguen de hacerla.
No obstante, hay una serie de aspectos que cada uno puede verificar antes de ir a la ITV. Asegurándote de que estos elementos estén en buenas condiciones y sean los adecuados, te ahorrarás acumular faltas leves y tener que volver en otro momento. Es necesario saber que con tres fallos leves te obligarán a volver otro día a pasar la revisión de nuevo.

Los neumáticos que utilices deben tener las medidas autorizadas para ese modelo. Es importante ver que el dibujo de la rueda tenga al menos la profundidad mínima necesaria y comprobar que la presión del aire sea correcta.

Es fundamental que no tengamos ninguna luz fundida, ya que contaría como un fallo leve. Hay que percatarse también de que los faros no estén rotos o en mal estado.

Las placas de la matrícula tienen que estar bien sujetas y en buenas condiciones, para que puedan leerse los números y las letras perfectamente.

Los inspectores de la ITV te pedirán accionar los limpiaparabrisas, que deben estar en buenas condiciones, por lo que también es necesario comprobar que hay suficiente líquido en el depósito.

El claxon es un elemento muy utilizado en nuestro día a día, más por unos que por otros, pero es necesario cerciorarse de que funciona correctamente.

Los cinturones son uno de los elementos de seguridad pasiva más importantes. Tienen que recogerse y anclarse sin problemas. Cualquier fallo en relación a ellos, será considerado falta grave.

Las puertas deben estar en buen estado y poder abrirse y cerrarse sin ninguna complicación. Las ventanillas también tienen que poder subir y bajar cuando las accionemos.

Al arrancar el coche, los diferentes testigos del cuadro de instrumentos se encienden durante unos segundos y a continuación, se apagan. Hay que asegurarse de que no se queden encendidos, ya que pueden ser motivo de falta.

El aceite debe estar dentro de sus niveles óptimos cuando hacemos la comprobación con la varilla. Lo ideal es que se sitúe entre el máximo y el mínimo indicado.

En la ITV se realizará una prueba de emisión de gases. Si sueles conducir despacio y por ciudad, es posible que se te acumule carbonilla en el tubo de escape. Para deshacerte de ella, es aconsejable circular durante un trayecto largo a altas revoluciones.

Tenemos que mirar que los bajos de nuestros coches y los parachoques estén bien sujetos. La luna delantera no debe estar rota ni rayada, sobre todo en la parte de visión del conductor.

Esto no hará que pases o no la ITV, aunque llevar el coche limpio por dentro y por fuera, dará una mejor imagen y todos sabemos que las primeras impresiones son muy importantes…