
Motor
El ID.3 podría ser el eléctrico que estás buscando
El Volkswagen ID.3 es el primer eléctrico de la marca, que ha sido concebido para marcar un punto de inflexión en su historia y nuestra movilidad.
El Volkswagen ID.3 marca un antes y un después en la historia de la movilidad. Sí, existen vehículos que pueden darse el lujo de tener tal importancia, y más si se trata de un modelo de Wolfsburg. Muchos (y muchas) os preguntaréis el porqué de tal afirmación, si ya existen coches eléctricos e incluso los hay de mayor autonomía. Que una marca como Volkswagen haya tardado tanto en presentar su primer vehículo eléctrico, concebido como tal desde sus inicios, no es falta de previsión. Este 2020 se marcó en el calendario de los fabricantes hace muchos años, este debía ser el punto de transición hacia la electrificación. Es entonces cuando Volkswagen vuelve a la carga, como lo hizo con el mítico escarabajo o el icónico Golf. Puede que algunos pensaran que se estaba quedando atrás pero no, nada más lejos de la realidad. El Volkswagen ID.3 es el primero de muchos modelos que tienen un único objetivo dentro de la marca: liderar el mercado mundial antes de finalizar 2025.
Si te interesa mínimamente el mundo de los coches seguro que comparas el ID.3 con el Volkswagen Golf. No vas mal encaminado. Sus cotas son muy parecidas pero el modelo eléctrico esconde un secreto: su distancia entre ejes. El Golf mide 2,63 metros entre rueda y rueda, mientras el ID.3 firma una batalla de 2,77 metros. Esta diferencia es clave para la habitabilidad interior, lo que convierte a este último lanzamiento en una opción muy interesante para las familias. Además, la firma alemana ha situado la batería en la zona baja del piso, lo que se traduce en un maletero también más grande. El ID.3 tiene una capacidad de carga de 385 litros, 5 más que el Golf convencional.
El Volkswagen ID.3 ya está disponible en los concesionarios españoles pero solo su versión Pro Performance, con motor de 204 CV y una batería de 58 kWh. Este modelo sale desde 36.154 euros pero puede alcanzar los 48.225 euros con el equipamiento Tour, que tiene la batería de 77 kWh y por tanto mayor autonomía eléctrica. Si estás pensando en comprar un coche cero emisiones para la familia, no dejes de leer.

Volkswagen llega algo tarde a la electrificación. Hemos visto algunas intentonas y también el Volkswagen e-Up! pero las pruebas anteriores eran eso, pruebas. Hasta ahora no existía una red de cargadores funcional y las baterías seguían siendo demasiado grandes y con poco rendimiento. Además, los tiempos de carga eran muy elevados y su fabricación no tenía nada de sostenible.

Uno de los objetivos de Volkswagen era limpiar, al máximo, su nombre y sus procesos de fabricación. Los coches eléctricos tienen un problema grave a solucionar, su producción contamina más que la de un modelo de combustión. Eso es algo que ya se está remediando en las marcas y el Volkswagen ID.3 es el primer coche neutro en emisiones desde su fabricación.

El Volkswagen ID.3 se fabrica en la planta de Zwichau, ideada para acoger el montaje de modelos 100% eléctricos. Esta planta utiliza energía producida de fuentes sostenibles y se han adaptado algunos procesos, como el de las pinturas, para que sean menos contaminantes. Las emisiones son inevitables pero la firma las compensará con proyectos medioambientales certificados.

El Volkswagen ID.3 vendría a ser como un Golf eléctrico. El eléctrico mide 4,26 metros de largo, mientras que el Golf firma 4,28 metros de carrocería. Es, por tanto, la alternativa limpia que ofrece la firma alemana sin salir de sus filas. A eso debemos sumarle la ventaja clave de la distancia entre ejes del ID.3, que es 14 centímetros más larga.

El nuevo ID.3 no es una adaptación de cualquier modelo anterior, como sucedía con el e-Up! o las anteriores electrificaciones del Golf. Este ha sido un modelo ideado como eléctrico desde el principio, con un interior repleto de pantallas y muy minimalista. De ahí que su diseño mantenga el lenguaje de la firma pero con características únicas como la ausencia de parrilla.

Esa batalla se traduce en un habitáculo mucho más espacioso, algo que se confirma cuando estás en su interior ultratecnológico. La sensación de amplitud es notable en las plazas delanteras y atrás podrán viajar, sin problemas, adultos de hasta 1,80 metros de alto. Esta limitación de altura hasta el techo viene dada por la colocación de las baterías, bajo el piso, pero no es significativa frente a un Golf.

El maletero del Volkswagen ID.3 es de formas cuadradas y tiene 385 litros, ampliable a 1.267 litros en caso de reclinar los asientos de atrás. Esta es una capacidad de carga comparable a cualquier compacto de motor térmico, lo que es un punto positivo para este eléctrico. Además, su boca de carga es de dimensiones considerables y no está muy alejada del suelo, lo que la hace más accesible.

Conducir un vehículo eléctrico es otro mundo. La patada del motor es instantánea pero también podemos jugar con los modos de conducción (Eco, Comfort y Sport) y la retención para conducirlo de manera agradable. La posición de conducción es muy baja y su paso por curva es firme y aplomado, sin apenas balanceos producidos por las baterías.

Los motores eléctricos no requieren de tanta refrigeración como los térmicos. La calandra es innecesaria y taparla mejora el flujo aerodinámico de todo el conjunto (0,26 CX). Por ese motivo mantienen las entradas de aire inferiores y las llantas son carenadas. El morro solo tiene las lamas cromadas que unen ambos grupos ópticos con el emblema de Volkswagen, situado en el centro y más arriba de lo normal.

El motor del ID.3 siempre es el mismo pero tiene diferentes potencias: 126, 145, 150 y 204 CV. Además, se ofrece con tres tamaños de batería: 45 kWh, 58 kWh y 77 kWh. Ambos parámetros afectan tanto a su potencia final como a la autonomía eléctrica del coche, que va desde los 330 kilómetros hasta los 550 kilómetros (ciclo WLTP).

La potencia de carga dependerá de la batería que escojamos. La básica, de 45 kWh, solo puede cargar hasta 7,2 kW en corriente alterna y tarda casi 10 horas en completarse. Calculamos que, en una toma de corriente continua de 50 kW, tardará más de una hora en conseguir el 0% a 80% de la carga. La batería de 77 kW acepta hasta los 11 kW en alterna (más de 6 horas) y supera los 125 kW en la continua. Si lo enchufamos a una toma de 100 kW tardará 35 minutos en completar el 0 a 80% de la carga.

El Volkswagen ID.3 está disponible con motor de 204 CV y batería de 58 kWh desde 36.145 euros. Es un precio algo elevado pero, en enero de 2021, llegará la versión Pure Performance con 150 CV de potencia y batería de 45 kWh. El próximo verano tocará el turno de la opción de 126 CV, con la batería pequeña, y la firma asegura que estará por debajo de los 30.000 euros.