
Salón de Tokio, espectáculo en clave deportivo
Una vez más el Salón de Tokio no ha defraudado a los aficionados a los coches más radicales y deportivos, con preparaciones para todos los gustos y creaciones que en algunos casos sólo veremos en los circuitos o en calle y carreteras asiáticas. Un reflejo de lo que ocurre cuando el manga y el automóvil se dan la mano.
Si hay un hay un certamen que se ha convertido en referencia para el coche oriental extremo y de competición, éste es el Salón de Tokio, una sita que ha modificado fechas a casa del COVID pero que finalmente se ha celebrado no sin la cancelación de algunos de los expositores asistentes. Aunque a la vista del resultado mantiene su nivel como un escaparate deportivo y tecnológico para todo lo que tiene que ver con el automóvil oriental, tanto en su variante de calle como en el de competición.
En esta edición apenas hemos visto coches de los que luego veremos rodando por las calles o incluso que podamos comprar en los concesionarios, pues muchos de los allí presentes sólo se comercializarán en el mercado asiático, caso del Toyota Yaris GRMN, una serie limitada que ha levantado inusitado interés a nivel internacional, o el Honda Civic type R, un GTi de culto que generación tras generación se ha convertido en la referencia de deportividad entre los automóviles compactos de altas prestaciones.
La electrificación y las nuevas tecnologías también han tenido su hueco propio, como el coche de competición STi E-RA presentado por Subaru con cuatro motores eléctricos que generan 1.088 caballos de forma conjunta o el Toyota GR GT3, otra opción de coche de competición aunque en este caso parece que tendrá declinación de calle en forma de supercar y del que aún desconocemos el motor ni la potencia que ofrecerá.
Entre las novedades de calle el sustituto del Nissan 370Z, en Japón conocido como el Fairlady Z, un coche de 400 caballos que todo parece indicar que no acabará por llegar a Europa por el momento, una verdadera pena para todos los aficionados a los deportivos.

Dos nuevas variantes para el coces estrella de Toyota desde hace dos temporadas, por un lado el Yaris y por otro el deportivo GR. En este caso se trata de una serie limitada a 500 unidades que tan sólo se venderá en Japón y que entrega 272 caballos de potencia, con una puesta a punto sencillamente de competición.

Su estética es sencillamente salvaje, con dos variantes, una de circuito y otra de rallyes sin alerón. El interior tiene hasta jaula de seguridad y está configurado para carreras. La carrocería es ahora 10 milímetros más baja y el coche pesa 20 kilos menos, todo para ir al límite sin contemplaciones.

Honda está ultimando la puesta a punto de su espectacular Civic Type R, por ello que aún lo veamos profundamente camuflado en estado de prototipo. Su objetivo al llegar a la calle es convertirse en la preparación super GTi más rápido del mercado, algo complicado a la vista del Toyota Yaris GR que acabamos de ver, aunque a decir verdad experiencia no le falta a Honda.

Conocido en Europa como Nissan Z, se trata del sustituto del 370Z, una verdadera referencia tanto por su aspecto como por su comportamiento. Por el momento sólo se venderá en Japón bajo la marca Fairlady, por las restrictiva normativa de emisiones que tenemos en el Viejo Continente.

Subaru quiere jugar a las carreras del futuro con este concept espectacular que representa un coche de competición con cuatro motores eléctricos que entrega 1.088 caballos, para un hipotético campeonato en el que podríamos encontrar a marcas como Porsche, que ya han presentado un prototipo similar.

Tanto el faldón delantero como el alerón trasero hablan a la claras del tipo de coche ante el que nos encontramos, que no tendrá variante de calle y sólo podremos verlo en los circuitos. Por el momento sólo competirá contra el crono en el circuito de Nürburgring, donde pretende batir el récord de tiempo de su categoría.

Además de la llamativa serie limitada del Yaris GR, Toyota nos presenta este concept de carreras que tendrá variante de calle por motivos de homologación, a imagen de lo que ocurre con Mercedes y su AMG GT y Ferrari con el 488. Cuando llegue al asfalto promete ser brutal tanto en estética como en prestaciones.

Si tenemos en cuenta su objetivo, su motor debería ser un seis cilindros con una potencia entre 500 y 600 caballos, de hecho parece bastante probable que tenga varias versiones con diferente precio y por su puesto con diferente puesta a punto, mandando siempre la deportividad extrema.