
Seguridad en internet
7 consejos de seguridad para móviles, tablets y ordenadores
¿No sabéis cómo proteger a vuestros hijos del uso creciente de aparatos electrónicos? Seguro que estos 7 consejos básicos os ayudan.

Está claro que uno de los juguetes preferidos de nuestros hijos son los aparatos electrónicos. Móviles, tablets, ordenadores portátiles… están a la orden del día en cuanto a su uso.
No hay porqué dejar de usarlos, sin embargo, y como todo, siempre hay que hacerlo con cautela y con algunas precauciones.
Nosotros os damos 7 consejos que os ayudarán para que vuestros hijos estén más seguro cuando estén conectados y, ¿por qué no? Los papás y las mamás más tranquilos.
Fuente: Panda Security

Si acabáis de regalarles alguno de estos productos a vuestros hijos, lo más importante es que tengan una conexión segura y su ordenador, tablets o smartphone estén protegidos. Para ello, el uso de un buen antivirus es vital. Con ello, tendrán más seguridad y nos evitará algún que otro disgusto.

Si hablábamos del antivirus, ahora lo hacemos del uso que le damos a los aparatos. Es muy importante tener las últimas actualizaciones de cada software para que así funcione correctamente. Los fabricantes suelen ir corrigiendo ciertos defectos, sin embargo, solo estaremos seguros si tenemos la última versión de cada programa, app, etc.

Muchas de las redes a los que nuestros hijos se conectan son públicas, lo que significa que cualquier persona puede tener acceso. De la misma forma, sería conveniente que los colegios e institutos usasen redes privadas para la seguridad de las personas que se conectan.
Aun así, si no queda otro remedio, más que usar un wifi público es aconsejable que uséis solo páginas seguras (las que tienen un candado). Normalmente, estaremos más protegidos de los ciberataques, pues páginas muy usuales, como facebook u otras redes sociales suelen enviar la información cifrada. Sin embargo, no debéis bajar la guardia.

Siempre hay que tener estos dispositivos controlados. No solo por los robos (un 33% de los objetos que se sustraen son smartphones) sino también porque solo unos pocos minutos de acceso físico al terminal, pueden ser suficientes para tener totalmente el control del móvil, tablet u ordenador.

Es conveniente que se tenga una contraseña distinta para cada terminal y servicio. Además, os aconsejamos que sean complejas, es decir, que incluyan números, mayúsculas, minúsculas, símbolos, etc. No uséis fechas de nacimiento o datos claves sobre vosotros o vuestros hijos. Esto también es aconsejable para el pin del móvil o si tienen un patrón de desbloqueo.

Aunque en la mayor parte de las redes sociales hay restricciones de edad, estas son fácilmente vulnerables, simplemente, cambiando la fecha de nacimiento. Por ello, es importante educar a nuestros hijos y enseñarles que todo lo que comparten con la gente, puede caer en malas manos.

Las prácticas que se hacían en el colegio o en el parque, ahora pueden hacerse por WhatsApp y por tanto nuestros niños son susceptibles de sufrir ciberbulling.
Si vuestros hijos padecen este tipo de acoso es importante que sepan pedir ayuda y, preferentemente, que lo hagan a adultos, por ello es fundamental que sepan que pueden contar con nosotros para afrontar estos hechos. Lo mejor es cortar lazos con la persona que está provocando la situación e ignorarla hasta que todo pase, pero ante todo mantened una comunicación abierta con vuestros hijos, ya que estas situaciones suelen ser muy complicadas porque, a veces, el acosador está en su círculo de amistades.
Igualmente, en cuanto al sexting probablemente muchos amigos de nuestros hijos, o incluso ellos mismos, compartan fotos que sean subidas de tono. Como adultos, nuestro deber es explicarles que esto no se puede hacer pues siempre pueden ser susceptibles de ser usadas para fines muy graves. Además, para que esto no suceda y no sientan la necesidad de compartir contenido íntimo el mejor remedio es, siempre, una buena educación basada en la información, la confianza y la comunicación fluida entre nosotros, sus padres y protectores, y nuestros hijos.