
Casas rurales con niños
Casas rurales a menos de una hora de Barcelona para ir con niños
A los niños les encanta viajar, les saca de la rutina y descubren nuevos mundos. A nosotros nos encanta viajar con ellos aunque los trayectos largos a veces se hacen eternos, por eso os dejamos una selección de casas rurales para ir con los pequeños cerca de Barcelona.
Viajar es una de las experiencias más reveladoras para los niños, ya que prueban comidas nuevas y típicas de otros lugares, descubren paisajes nuevos y, en general, les abre los ojos a nuevas formas de vida, culturas y personas. Pero viajar en familia también puede ser abrumador, y suele generar estrés incluso antes de decidir dónde viajaremos. Según datos de la agencia de viajes online Rumbo, un 10% de las consultas más frecuentes de los usuarios están relacionadas con viajes en familia, así que ¿qué podemos hacer para que los viajes no sean un quebradero de cabeza?
Trucos para ayudar a viajar con niños
- Lleva siempre su cuento (o cuentos) favoritos y unos cuantos juguetes para que se entretenga en el coche.
- Si viajáis con un bebé o con niños peques olvidaos de ir cargando con pañales, leches o comida especial, lo mejor es hacer una compra online y poner la dirección de entrega en el lugar en el que os vayáis a hospedar.
- Si el trayecto en coche va a ser largo siempre podéis envolver una pequeña sorpresa en papel de regalo y dársela durante el viaje. No es necesario que sea nada nuevo, puede tratarse incluso de su juguete favorito.
- Lleva cuadernos para colorear y pinturas de colores, anímalos a dibujar lo que piensan que se encontrarán cuando lleguen al destino.
- Lleva algún juguete que sea especial para el coche como los bloques de construcción con ventosas que los pueden pegar en las ventanas de atrás mientras dejan volar su imaginación.
- Sed flexibles. Los niños son expertos en el arte de la improvisación y, sobre todo, en hacernos a los adultos improvisar. Por eso, aunque tengáis ganas de llegar pronto y os hayáis organizado un pormenorizado horario de comidas así que lo mejor es, dentro de un orden, intentar tener en cuenta las opiniones de los niños y hacer que participen en las decisiones del viaje, ya que lo vivirán con más entusiasmo.
- Juega con ellos. Este es el mejor consejo, ellos disfrutan con nosotros y todo ese tiempo que pasemos jugando con ellos será tiempo que pase volando y, sobre todo, tiempo que evitaremos escuchar la temida frase “¿Cuánto queda?”
Para no volvernos locos y si no queremos tardar mucho en llegar, os presentamos una selección de casas rurales que nos ofrece tuscasasrurales.com que se encuentran muy muy cerquita de la Ciudad Condal.

Situada en la localidad de Cardona, famosa por sus minas de sal, esta acogedora casa de turismo rural se ubica encima de una colina, de muy fácil acceso y, sin embargo, con unas vistas muy impresionantes desde ella. La localidad pertenece a la comarca del Bages, y su censo ronda los 4.700 habitantes.
La vivienda, que ofrece 14 plazas, dispone de 5 acogedoras habitaciones, 4 baños, sala de estar, comedor, cocina, porche y un jardín en el que encontraremos barbacoa junto a la cual hay un comedor cubierto. También hay una estupenda piscina climatizada.
En Cardona, además de las minas de sal, podemos visitar las obras que componen su extenso patrimonio, entre ellas el Castillo, la Iglesia gótica de San Miguel, la Colegiata de San Vicente, las Capilla de Santa Eulalia, la Torre del Botxí, la Torre de la Minyona, el Pont Vell o las antiguas murallas.
Podemos visitar asimismo la ciudad de Manresa, capital de la comarca, con un extenso patrimonio arquitectónico, entre cuyas obras destacan la Basílica de Santa María o la Cueva de San Ignacio.

Cal Farrés se encuentra en la población de Aleny, una población que forma parte de la comarca de L’Anoia y en donde viven tan solo una cuarentena de personas. Pertenece al municipio de Calonge de Segarra, del cual, junto con otros núcleos urbanos, es una pedanía. Se halla en lo alto de un pequeño cerro, y en su entorno abundan los campos de cultivo, así como las extensiones de bosques de encinas y robles. Su estratégica situación en el centro de la comunidad convierte el pueblo en un destino ideal para visitar desde ella un gran número de lugares interesantes, siendo además un territorio muy idóneo para las excursiones, las rutas y las actividades al aire libre.
En cuanto al alojamiento, existen dos confortables casas independientes. Aprovechando las estancias destinadas a los animales de Can Farrés, una antigua casa solariega típica del lugar, se han construido en ellas dos estupendas y confortables viviendas, que están dedicadas al turismo rural. Se trata de las casas La Farraja y Les Corts. Ambas han sido perfectamente equipadas con todo lo necesario para una estancia agradable, y decoradas con un estilo propio de montaña, con una especial atención a los más pequeños detalles. El conjunto tiene una capacidad total de 10 plazas.

Sin movernos aún de la comarca del Bergadà, encontramos otro confortable alojamiento rural, Cal Benet, en esta ocasión en la localidad de Montmajor, un bonito pueblo que ronda los 450 habitantes, ideal para el descanso y para conocer desde él la provincia.
Cal Benet es una antigua casa de campo de mediados del siglo XVIII, restaurada para el turismo, donde aún hoy se crían terneros y se siguen realizando labores agrícolas. Se pueden alojar en ella hasta 11 personas. Consta de 5 habitaciones, 3 baños, sala de estar, comedor, cocina y un gran jardín con barbacoa y piscina.
En Montmajor podremos ver su Iglesia de Sant Esteve, también de estilo románico. Y en sus cercanías son muy interesantes las minas de sal de Cardona o el municipio de Berga, donde además de su considerable patrimonio podemos visitar su atractivo Museo del Circo, así como el Santuario de Queralt en sus afueras, de una gran belleza.

Casa Lladó se sitúa en el municipio de Casserres, es muy atractivo, con un censo que ronda los 1500 habitantes, con sus casas y calles de piedra y con un importante legado patrimonial en relación a su tamaño. Se halla muy cerca de la capital comarcal, Berga, y su entorno es ideal para las excursiones, el senderismo y las actividades al aire libre. También es un punto de partida idóneo para conocer la ciudad de Barcelona, ya que se encuentra a una distancia máxima de una hora en coche.
En cuanto a los alojamientos, se trata de tres fantásticas viviendas, equipadas con todo lujo de detalles, confortables y perfectamente decoradas. Una de ellas, Cal Urbici, se sitúa en el mismo casco antiguo del pueblo de Casserres, mientras que las otras dos, Cal Pastor y Camí Ral, se encuentran en las afueras, en plena montaña.

Este alojamiento se encuentra en el municipio de Sant Quintí de Mediona, perteneciente a la comarca del Alt Penedès. En la localidad viven unas 2.100 personas.
Se trata de una impresionante masía del siglo XVI, rodeada de viñedos. Reformada para el turismo, ha sido decorada teniendo en cuenta los más pequeños detalles. Su capacidad es de18 plazas. Las habitaciones combinan el estilo rústico con el moderno, y disponen de baño y televisión. Entre las zonas comunes se encuentran el salón, el comedor, la cocina y un extenso jardín con piscina y una pequeña granja.
Es un enclave ideal para el enoturismo, visitando algunos de los muchos viñedos y bodegas de la comarca. O para conocer Barcelona, a tan sólo media hora en coche y muy bien comunicada con transporte público.

Cal Fabrega se trata de una antigua masía catalana típica de la zona, donde pasar unos momentos inolvidables junto a su familia o amigos, tiene una capacidad para 30 personas y cuesta alrededor de 28 euros por persona y noche.
El alojamiento se encuentra situado en zona de montaña, en la población de Casserres, provincia de Barcelona.

Baumala es una casa de turismo rural situada en la localidad de Borredá, la cual forma parte de la comarca del Bergadà. Se halla en plena zona pirenaica, muy bien comunicada con la capital provincial, la ciudad de Barcelona. La capacidad del alojamiento es de 22 plazas. Se trata de una antigua masía catalana rodeada de bosque, restaurada para el turismo. Se ha decorado con un estilo rústico en el que priman la piedra y la madera, muy acogedora, y ofrece 8 confortables habitaciones y zonas comunes como su salón, con televisión de 63 pulgadas y zonas de juegos para todos. Hay también billar y futbolín, pista de petanca, columpios para los niños, barbacoa y una fantástica piscina- jacuzzi al aire libre.
Borredá es un pueblo muy atractivo, de calles empedradas, que no alcanza los 500 vecinos, con dos preciosas iglesias románicas, la de Santa María y la de San Saturnino de Rotgers.
En los alrededores podemos visitar el carismático Valle de Nuria, así como la Riera de Merlés, donde abundan las pozas de aguas frías y cristalinas. En invierno se puede practicar el esquí en la vecina estación de La Molina.

Moià es una bonita población que se sitúa a 717 metros de altitud sobre el nivel del mar, y en la cual viven unas 3000 personas. Pertenece a la comarca del Moianès, y su situación en pleno centro geográfico de Catalunya la convierte en un destino ideal para conocer cualquier punto de interés de la comunidad sin grandes desplazamientos.
El alojamiento es una antigua masía del siglo XVIII, ubicada en plena naturaleza, que ha sido reformada para dedicarla al turismo rural, dotándola de todas las comodidades de la vida actual pero respetando su estructura y elementos originales. Se trata de una casa de dos plantas, cada una independiente de la otra, que conforman dos viviendas distintas, Se pueden alojar un total de 16 personas, 8 en cada casa.

Este atractivo alojamiento se encuentra en el municipio de Sant Llorenç d’Hortons, en la comarca del Alt Penedès, famosa por sus prestigiosos vinos y cavas.
Se trata de una masía de principios del siglo XVIII, rodeada de viñedos y en la que se elaboran vinos. Su capacidad es de 18 plazas, distribuidas entre 2 apartamentos y 6 habitaciones dobles. Entre sus zonas comunes sobresale su zona de spa, con sauna y bañera de hidromasaje, así como sus vistosos jardines con piscina al aire libre.
En las afueras de la localidad podemos ver la bonita Capilla de San Juan Samora, y en la proximidades visitar el turístico municipio de Sitges, con una gran oferta de ocio y unas bellísimas playas. Además, a tan sólo 42 kilómetros se encuentra la ciudad de Barcelona.

Cal Barrusca se trata de una antigua casona y pajar que data del s. XIX que dispone de baño hidromasaje, y un jardín con huerto y piscina. con capacidad para 10 personas, su alojamiento cuesta alrededor de 22 euros por persona y noche.
El alojamiento se encuentra situado en zona de montaña, en la población de Els Prats de Rei, provincia de Barcelona, una zona en la que se puede realizar en sus alrededores, actividades de: senderismo, rutas en bici, montar a caballo, paseos en quads… entre otras cosas.

En el complejo encontraremos zonas comunes que nos van a hacer la estancia más agradable, ya que podremos disfrutar de un parque infantil, campo de fútbol, pistas de pádel y una estupenda piscina climatizada, así como de un espacio habilitado con barbacoa para comer al aire libre.
La localidad en que nos hallamos, La Nou del Berguedá, a pesar de ser un pueblo muy pequeño, dispone de obras muy interesantes que podemos visitar, como la iglesia de Sant Martí de la Nou, levantada a finales del siglo XII y de estilo románico, o como el majestuoso Santuario consagrado a la Virgen de Lourdes.
También es muy recomendable visitar el municipio de Berga, capital de la comarca, que tiene un patrimonio muy extenso, como sus iglesias de Santa Eulalia, de San Juan o de San Quirico de Pedret, esta última del siglo IX, así como el Portal de Santa Magdalena, la Capilla de la Piedad o el Molino de la Sal. Mención aparte merece su Santuario de Santa María de Queralt, levantado durante el siglo XVII, y que guarda en su interior una valiosa imagen de la Virgen del siglo XI. Se halla situado en lo alto de la cima de la Sierra de Queralt, a la cual se puede subir en funicular. También encontraremos junto al Santuario un restaurante.

Cal Griva es una antigua casona construida en el siglo XVII, actualmente habilitada como alojamiento rural. Se halla en la pequeña localidad de L’Espunyola, perteneciente también a la comarca pirenaica del Bergadá y en la que viven poco más de 200 vecinos.
En la casa, que se dedica también a actividades agrícolas y ganaderas ecológicas, se pueden hospedar hasta 17 personas, distribuidas en sus 6 confortables habitaciones. La vivienda, amplia y muy luminosa y decorada con un atractivo estilo rústico, consta también de salón, comedor, cocina, sala de juegos y un jardín con piscina y zona de barbacoa.
En L’Espunyola podremos ver su Iglesia de Santa Margalida de Mercadal, de estilo románico.
Cerca tenemos espectaculares parajes, como la Sierra del Cadí, los cerros de Capolat o el Pedraforca, un pico que es todo un icono para los montañeros catalanes.