
Para amantes de los animales
Los mejores zoológicos de España
Algunos de ellos se llevan la atención de los focos por su larga tradición o estar situados en los principales núcleos de población del país, grandes centros turísticos además, pero a lo largo de toda la geografía se pueden encontrar magníficas instalaciones que priorizan la calidad de vida de los animales que acogen en ellas.
Aunque todo el verano se considera temporada alta en los parques temáticos y zoológicos repartidos por el país, la primavera y también el final del estío, cuando las temperaturas no se disparan, son dos épocas ideales para visitarlos. Controversias aparte, España cuenta con algunos magníficos espacios donde mayores y pequeños puedan disfrutar de las criaturas vivas propias de nuestro hábitat pero también de otros a los que no se tiene la suerte de poder viajar en toda una vida, y a esto se suma que en varios de los zoos españoles se lleva a cabo una magnífica labor de conservación de especies en peligro de extinción.
Hace muchísimas décadas que el Zoo Aquarium de Madrid es uno de los puntos fuertes en la oferta turística de la ciudad para familias que viajan a conocer la capital y sus alrededores con niños, y su fama ha hecho que quizá se conozcan poco otras instalaciones similares, incluso más modernas, distribuidas por el resto del país. No es necesario por lo tanto acudir a Madrid para poder disfrutar in situ junto con los más pequeños de jirafas, felinos, osos de todas las subespecies, animales marinos, elefantes y demás criaturas que desde bien pequeñitos llevan viendo los peques en los cuentos.
Es más, cuesta mucho poder hacer una selección de 10 zoológicos españoles que merezcan una visita, y no precisamente porque no los haya suficientemente buenos para incluirlos en dicho top, sino todo lo contrario. Seguramente, de hecho, nos hemos dejado fuera de nuestra selección a algunos que merecerían estar dentro de ella, pero también hemos querido dar prioridad a criterios complementarios, como por ejemplo la situación geográfica de ellos, de modo que estén dispersos, en la medida de lo posible, alrededor de toda la geografía española.
Por supuesto, en todos ellos se han adaptado los protocolos de seguridad y prevención relativos a la pandemia de la COVID-19, de manera que sus visitantes puedan acudir con la garantía de que lo están haciendo a un espacio seguro, algo fundamental teniendo en cuenta las delicadas circunstancias sanitarias que condicionan la vida social hoy en día.

Uno de los zoológicos más antiguos de España es el de la ciudad de Barcelona. Ubicado en La Ciudadela, fue fundado en 1892 y en sus instalaciones se puede disfrutar de una de las poblaciones animales en cautividad más grande de Europa.

Incluimos a los dos centros que comparten nombre y proyecto en el mismo epígrafe porque son complementarios ya que los hábitats salvajes reproducidos en ellos no se repiten en el otro. Lo que el visitante ve en Fuengirola no lo ve en Valencia y viceversa. En ambos casos, sus instalaciones son impecables, transmitiendo en todo momento la sensación de que los animales mantienen una excelente calidad de vida.

Ya hemos hablado de él en el texto porque este zoológico inaugurado en 1972 es toda una referencia a nivel nacional. Desde entonces se ha ido modificando y sumando nuevos espacios a los de toda la vida como el aquarium, que completó una colección de animales procedentes de los cinco continentes. Los famosos osos panda son el símbolo del zoológico que tiene en la zona donde conviven jirafas y cebras como una de las favoritas de los peques.

Este parque natural situado en Cantabria es quizá el más original de España por su concepto de especies en semilibertad. No hay entorno más natural que este para sus animales, entre los que se encuentra una enorme población de osos pardos, símbolo animal de los Picos de Europa, pero también avestruces o jirafas, por mencionar dos ejemplos de animales llegados de hábitats muy distintos. Los teleféricos que ayudan a recorrer el parque son la atracción complementaria perfecta para los peques.

Desde 2001 es el complemento perfecto al Zoo Aquarium de Madrid. Entre otras cosas, por su concepto, diferente a este al estar organizado en ecosistemas, pero también por su ubicación en la ciudad, justo al este, al otro lado prácticamente de la Casa de Campo, espacio natural donde se ubica el zoo tradicional. Solamente el espacio dedicado a los pingüinos ya compensa la visita, y más si van niños.

En el municipio madrileño de Aldea del fresno, cerca de Navalcarnero, se sitúa este original zoológico que incluimos en el top por su formato distinto al habitual en este tipo de parques ya que se recorre con el vehículo particular del visitante, que se entremezcla con la fauna que vive en semilibertad en sus instalaciones. Un minisafari en toda regla que hará las delicias de los peques.

Uno de los zoológicos más famosos y visitados de España es este espacio dedicado a los animales marinos situado en pleno centro de Valencia, dentro del complejo conocido como Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia. Basado en la recreación de distintos mares y oceános de todo el globo, cuenta con algunas de las especies acuáticas más espectaculares del planeta.

Una joya semidesconocida dentro del universo de los zoológicos españoles es el Zoobotánico de Jérez, en Cádiz, un espacio en el que se llevan a cabo diversos programas de conservación de especies en peligro de extinción, entre ellos el lince ibérico. Se trata de la población de animales en cautividad más grande de Andalucía, que está muy bien acompañada por una espectacular colección de especies botánicas.

Muy visitado en los meses de verano por su ubicación en el famoso municipio alicantino, Mundomar es un espacio ideal para que los niños y adolescentes cumplan su deseo de nadar junto a especies adoradas por todos como los delfines o los leones marinos. Además, destaca su labor divulgativa gracias al completo programa de espectáculos que ofrece.

Aunque en la isla de Tenerife se encuentra el famoso Loro Parque, dado que este no necesita reconocimientos públicos porque es de los zoológicos más visitados y conocidos del país, merecela pena destacar la alternativa presente en la misma isla canaria, el Jungle Park Tenerife, en cuyas instalaciones se recrea la selva tropical más grande de Europa. Más de 300 especies de todo el mundo la habitan.