
Dictados para practicar ortografía
Dictados para mejorar la ortografía de los niños
Una de las mejores fórmulas que existe para que los niños aprendan a escribir y a conocer las reglas de ortografía es, sin duda, el dictado. Un ejercicio que lleva utilizándose durante décadas y que permite al alumno adquirir multitud de beneficios. Hacemos una recopilación de dictados para poner en práctica esta técnica.
Seguramente la mayoría de personas conozca de qué tratan los dictados. De hecho, es bastante probable que todos hayamos hecho unos cuantos durante nuestra etapa escolar puesto que es una técnica que se lleva utilizando durante décadas dados los buenos resultados que ofrece en cuanto a la hora de aprender a escribir.
Especialmente se utilizan en Primaria cuando todavía tenemos que afinar algo más nuestra escritura y sobre todo interiorizar bien las reglas de ortografía. Para que los niños obtengan todos los beneficios que les pueden aportar los dictados, estos deben ser acordes tanto a su edad como a su nivel de aprendizaje.
Hacer un dictado consiste básicamente en la lectura de un texto en voz alta para que el niño lo vaya escribiendo mientras interpreta cómo debe hacerlo. Se trata de un ejercicio muy común y el mejor que pueden hacer los niños para recordar cómo se escriben algunas palabras y para fijar algunas normas gramaticales.
En cuanto a la extensión que debe tener cada ejercicio depende de la edad de los pequeños y de su nivel. Si están realizando sus primeros dictados (normalmente suele ser en primero de primaria cuando se empiezan a hacer en las clases) lo mejor es que sean cortos y de una temática amena y algo divertida para ellos.
Poco a poco, según van creciendo y desarrollando sus capacidades, la dificultad debe aumentar con dictados más largos y complicados (ortográficamente hablando). En lo que se refiere al tiempo que se debe pasar haciendo dictados no existe una cifra concreta, pero es preferible dedicar en torno a unos 10 minutos y que no se convierta en una actividad aburrida y tediosa. De hecho, es mejor dedicar menos tiempo y que sea una tarea que se realice frecuentemente.
Teniendo esto en cuenta, debemos saber que con los dictados los niños no solo mejorarán su escritura manual y su ortografía, también se fomentará su comprensión lectora, adquirirán vocabulario nuevo, se potenciará su concentración y atención e incluso también mejorará su propia autoevaluación si optamos por dejar que ellos mismos se corrijan sus fallos. Asimismo, también sirve para conocer el nivel de escritura que tiene cada alumno.
No hay excusa para no querer poner en práctica una técnica tan provechosa como esta para la educación de los niños. Mira estos ejemplos de dictados y... ¡A escribir!

- Jorge sale sigiloso por el jardín para jugar con Gabriel al golf.
- El cirujano curó con urgencia al agente herido por una jirafa salvaje.

- El ratón Rigoberto corre por la carretera para ver a su prima Rita.
- Las ruedas del ferrocarril son de hierro.

- Hugo había ahorrado tanto dinero que en su pequeña hucha no cabía ni una pequeña haba.
- Mi hermana tomaba un helado de vainilla mientras veía como caían las hojas de los árboles que había en la huerta del abuelo Hugo.

- El burro Bernardo lleva unas botas rojas tan brillantes y una bufanda azul tan bonita que los demás burros le miran con admiración.
- Bruno se puso su bañador, sacó su bote y remó por la bahía.

- Blanca iba a casa de su prima Vanesa en bicicleta cuando vio en los columpios del parque a su amigo Álvaro. Se entretuvo jugando con él y perdió la noción del tiempo, tanto que, al llegar allí, su prima estaba tan enfadada que no abrió la boca.