6 beneficios del yoga para los niños
Practicar yoga durante la infancia favorece la concentración y la autoconfianza, al tiempo que es una opción saludable contra la ansiedad y el estrés infantil.
El intenso ritmo de vida de la sociedad en la que vivimos afecta a las personas adultas, pero también a los más pequeños de la casa.
“Los videojuegos, el exceso de tareas y actividades extraescolares y la competitividad general del día a día, puede llevar a niños y niñas a experimentar estados de ansiedad nada beneficiosos para su salud, ni su desarrollo físico y mental”, señala Martha Tena, profesora de yoga especializada en yoga infantil y familiar, de Televisión Consciente , plataforma de vídeos online en español dedicados al cuidado personal y al desarrollo físico y consciente.
Beneficios que no dejarán indiferente a tu hijo
Según un estudio elaborado por AEPNYA (Asociación Española de Psiquiatría del Niño y del Adolescente) los casos de ansiedad y estrés en la infancia y adolescencia han aumentado convirtiéndose en una de las patologías psiquiátricas más frecuentes.
Se estima que en España, entre el 10-20% de menores sufre algún tipo de patología psiquiátrica. En estos casos y, en general, en los primeros años de vida del niño, el yoga es una opción ideal dados los beneficios que aporta.
Estos son los principales:
- Elude las situaciones de estrés, proporcionando a quienes lo practican, en un espacio de distensión y juego, herramientas para cultivar la salud del cuerpo, la relajación, la concentración y la conciencia en las necesidades personales.
- Fomenta la salud emocional, ayudando a responder de forma más sana ante los retos que presenta la vida.
- También a nivel emocional, el yoga, a través del trabajo corporal, de técnicas de respiración y el cultivo de la concentración, estimula la calma y la autoconfianza, al tiempo que contribuye a motivar un sueño reparador y profundo.
- Proporciona técnicas muy sencillas que pueden ayudar ante cualquier emoción difícil de manejar, como puede ser el enfado, la frustración, la ira o la tristeza.
- A nivel físico y corporal ayuda a fortalecer los músculos y a la vez desarrolla una mayor flexibilidad, algo importantísimo en las etapas del desarrollo infantil.
- Practicar yoga también ayuda a mejorar la función cerebral, puesto que favorece su coordinación, el tiempo de reacción y la capacidad de memoria. A esto se une la mejora de su capacidad para resolver problemas y adquirir información, así como a fomentar la imaginación y la creatividad.