Aunque es bueno fomentar la autonomía de los niños desde pequeños en tareas como esta, para darles ejemplo y enseñarles, lo normal es que nos encarguemos de lavarles los dientes durante un tiempo en las primeras edades. Es bueno hacerlo porque podemos enseñarles una rutina que incluya hábitos positivos y fáciles de seguir, que puedan interiorizar y repitan ellos solos cuando ya no dependan de ti para dejar sus dientes relucientes.
Buscando consejos de expertos para intentar mejorar la rutina del lavado de dientes de los más peques de la casa, que suele ser caótica y de mala calidad si no marcamos antes unas pautas claras, hemos encontrado una publicación muy interesante al respecto de la pediatra Mar López Sureda.
La médico, divulgadora con una comunidad de seguidores muy grande en redes sociales, comparte hasta tres hábitos o trucos para lavar los dientes de una manera adecuada. Tres hábitos que podéis empezar a aplicar vosotros como adultos de referencia hasta que vuestros hijos e hijas tengan la capacidad para intentarlo por sí mismos. Entonces, aprovechando esas primeras veces con vosotros, ya habrán podido aprender cómo se pueden asegurar de que el cepillo ha pasado por todos los dientes de su boca.
Tres hábitos para la rutina de limpieza de los dientes
El método que utiliza la doctora Mar López Sureda con sus hijos en casa se divide en tres pasos muy concretos, todos ellos hábitos que son muy fáciles de aprender e interiorizar a base de repetir siempre la misma dinámica.
El primero de ellos consiste en dividir la boca en cuartos. Por un lado, la parte superior, en dos partes: arriba izquierda y arriba derecha. Y por otro lado, con la misma lógica, dividir también la parte inferior. “Así es más fácil que no te dejes ningún diente sin limpiar”, dice la doctora.

El segundo consejo de Mar López Sureda que podéis aplicar y enseñar a vuestros hijos para mejorar su higiene bucal es que debemos cepillar los dientes en sus tres caras. Una de ellas es la delantera o externa, “la que vemos al sonreír”, apunta la doctora; otra es la interior, que da a la lengua; y también está la cara superior, “la que mastica”, indica la pediatra.
Si quieres sacar nota en el cepillado de dientes de tus hijos, la doctora Mar López Sureda añade a sus recomendaciones un tercer hábito: cómo se cepilla cada una de las tres caras.
La parte de arriba, explica la pediatra, “se limpia inclinando el cepillo hacia la encía, barriendo desde la encía hacia abajo”. En el caso de la parte inferior, la técnica adecuada es la misma, según la experta: “se limpia igual, barriendo desde la encía hacia fuera”, dice.
Y por último, la parte superior, la zona por la que masticamos y se quedan muchos restos de comida, “se limpian de delante hacia atrás en movimientos horizontales”, concluye Mar López Sureda.
Como ves, es un método relativamente sencillo, especialmente los dos primeros hábitos, que podéis trasladar a vuestros hijos e hijas desde pequeños: dividir la cara en cuatro cuartos para no dejarse ninguna parte sin limpiar y acordarse de pasar el cepillo por las tres caras de los dientes. El cómo podéis enseñárselo poco a poco, con la práctica.