Esta es la causa pediátrica por la que a algunos bebés se les pone la lengua blanca

Ver una capa blanca sobre la superficie de la lengua de un bebé puede deberse a dos causas, una de ellas sin importancia, y otra que sí requiere tratamiento específico. Aprender a diferenciarlas podrá ayudarnos a saber si precisa o no tratamiento.
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A medida que pasamos más y más tiempo observando al recién nacido, es posible, en ocasiones, notar la presencia de una capa blanquecina en su pequeña lengua. Muchas madres y padres se alarman, aunque lo cierto es que podría ser la señal de una de las dos causas siguientes: residuos de leche, o bien una infección por hongos llamada muguet.

¿Qué es la lengua blanca en bebés?

La lengua blanca en los bebés es una preocupación común entre los padres, especialmente en los primeros meses de vida. Es esencial comprender las posibles causas para poder actuar de manera adecuada y garantizar el bienestar del bebé.

Identificación de la lengua blanca: residuos de leche o hongos

Es normal que, mientras duerme, nos sentemos delante y empecemos a observarlo con fascinación: su pelo, sus facciones, su respiración… Mientras que, cuando está despierto, es común también que lo observemos con más detenimiento si cabe, para detectar cualquier condición o afección antes de que avance demasiado.

Es completamente común —y normal— preocuparnos por el bebé. Y nunca debes dejar que nadie te diga que aquello que te puede estar preocupando sea una tontería. Así, si observas una capa blanca en la lengua del recién nacido o de tu bebé pequeño es normal que pienses inmediatamente que se trate de hongos en la boca y llames al pediatra. Y, efectivamente, no hay nada de malo en ello.

La lengua blanca en los bebés puede ser una señal de dos situaciones distintas: residuos de leche o una infección por hongos. Pero también existe la posibilidad de que lo que crees que es un hongo sea en realidad residuos de leche. Distinguirlos puede ser complicado, dado que suelen tener síntomas parecidos.

Diferencias clave entre residuos de leche y candidiasis oral

Las diferencias entre los residuos de leche y la candidiasis oral son sutiles pero importantes. Los residuos de leche suelen aparecer después de las tomas y se pueden eliminar fácilmente con una gasa húmeda. Además son más fáciles de eliminar y no causan molestias.

En cambio, la candidiasis se presenta como manchas blancas que se adhieren a la lengua y otras áreas de la boca, y pueden ir acompañadas de enrojecimiento o inflamación. La candidiasis oral no solo afecta la lengua, sino que también puede aparecer en los labios y las mejillas internas, lo que provoca un aspecto blanquecino en varias áreas de la boca del bebé. Para distinguir entre residuos de leche y hongos, es importante observar si la capa blanca se extiende a otras partes de la boca, como las encías o las mejillas. Si es así, es probable que se trate de candidiasis oral. Además, esta condición puede hacer que el bebé rechace las tomas debido al dolor o las molestias que experimenta.

La candidiasis oral necesita atención médica y tratamiento antifúngico.

Lengua blanca del bebé. Fuente: Freepik

Causas de la lengua blanca en el bebé

Siempre hay que estar atento a la aparición de cualquier cambio en la boca del bebé que pueda indicar una condición más seria, pero la causa pueden ser simplemente residuos de la leche.

Residuos de leche: ¿cómo se producen y cómo eliminarlos?

Los residuos de leche en la lengua del bebé son comunes y generalmente inofensivos. Estos residuos se forman cuando pequeñas cantidades de leche se adhieren a la lengua después de la alimentación.

Una de las formas más fáciles para saber que se trata de una mancha blanquecina causada por un residuo de leche es tratar de limpiarla con la ayuda de una gasa húmeda y tibia. Esto podría considerarse un paso previo a la higiene bucodental.

Es importante realizar esta limpieza con delicadeza para no irritar la delicada piel de la boca del bebé. Si bien los residuos de leche no son motivo de preocupación, una higiene adecuada es fundamental para prevenir la acumulación excesiva y asegurar que la boca del bebé se mantenga saludable.

De esta forma, si el residuo se desprende con facilidad o disminuye en apariencia se trata de un residuo de leche, y no de hongos. De hecho, debes tener en cuenta que los residuos de leche, por lo general, tienden a ser más notables después de las comidas, y solo aparecen en la lengua.

Falta de saliva en recién nacidos y sus efectos

¿Y qué causa esta acumulación de leche en esta zona? En pocas palabras, la falta de saliva. A diferencia de un adulto, la boca del recién nacido, especialmente durante los primeros meses después del nacimiento (hasta aproximadamente el cuarto mes de vida), no produce mucha saliva, por lo que, a menos cantidad de saliva, más difícil es retirar o eliminar la leche que queda en ella.

La falta de saliva no solo contribuye a la lengua blanca, sino que también puede afectar la capacidad del bebé para procesar los alimentos adecuadamente. La saliva contiene enzimas que inician la digestión y ayudan a descomponer los nutrientes, por lo que su ausencia puede tener un impacto en la digestión del bebé. A medida que el bebé crece, la producción de saliva aumenta, lo que reduce la aparición de residuos de leche en la lengua.

Candidiasis oral: síntomas, causas y diferenciación

Conocida con el nombre de candidiasis oral (también denominado popularmente como muguet), se trata de una infección por hongos causada por un crecimiento excesivo del hongo Candida, el mismo tipo de causa infecciones vaginales por hongos, o erupciones de pañal. De hecho, es muy frecuente que a la candidiasis oral se asocie en unos días una candidiasis de la zona del pañal. Este hongo es una parte normal de la flora bucal, pero puede proliferar en exceso cuando el sistema inmunológico del bebé es inmaduro o debido al uso de antibióticos.

Los síntomas de la candidiasis oral incluyen manchas blancas persistentes en la lengua, labios y mejillas internas, que no se desprenden fácilmente y pueden causar dolor o irritación.

¿Cuándo la lengua blanca es motivo de preocupación? Fuente: freepic.diller - Freepik

¿Cuándo la lengua blanca es motivo de preocupación?

Cuando creemos que podemos estar ante candidiasis oral es momento que (pre)ocuparse e ir al pediatra.

Señales de muguet: ¿Cuándo acudir al pediatra?

En el caso de tratarse de una candidiasis oral, lo más común es que la infección se forme en partes de la boca relacionadas o involucradas con la succión, lo que incluye no solo la lengua del bebé, sino sus labios y la parte interna de las mejillas. Es frecuente que el diagnóstico inicial se haga porque haya tomas que hace mucho peor y se le han empezado a ver lesiones blanquecinas en las encías.

Es importante que los padres estén atentos a las señales que indican la presencia de muguet en la boca del bebé. Si las manchas blancas persisten y no se eliminan con una limpieza suave, o si el bebé muestra signos de incomodidad al alimentarse, es recomendable consultar al pediatra. El pediatra podrá confirmar el diagnóstico de candidiasis oral y prescribir el tratamiento adecuado.

Relación entre candidiasis y problemas de alimentación

La candidiasis oral puede tener un impacto significativo en la alimentación del bebé. Las manchas blancas en la boca pueden causar dolor o irritación, lo que lleva al bebé a rechazar el pecho o el biberón. Esto puede resultar en una ingesta insuficiente de nutrientes y afectar al desarrollo del bebé.

Los problemas de alimentación asociados con la candidiasis también pueden generar ansiedad en los padres, quienes pueden preocuparse por la salud y el bienestar de su bebé. Es importante abordar estos problemas para asegurar que el bebé reciba la nutrición adecuada. El tratamiento médico de la candidiasis oral puede aliviar rápidamente los síntomas y mejorar la alimentación del bebé.

Solo hay que seguir las recomendaciones del pediatra y mantener una buena higiene para garantizar una recuperación completa y prevenir futuras infecciones.

Lengua blanca del bebé: cuáles son las causas. Fuente: senivpetro - Freepik

Tratamiento y prevención de la lengua blanca en bebés

La candidiasis requiere tratamiento médico. El tratamiento de la candidiasis oral generalmente implica el uso de geles antifúngicos prescritos por un pediatra. Es importante mantener una buena higiene de los chupetes, tetinas y cualquier objeto que el bebé lleve a la boca, para prevenir la reinfección y asegurar una recuperación rápida.

Tratamientos para la candidiasis oral en bebés

Es importante seguir las indicaciones del médico para asegurar que el tratamiento sea efectivo y prevenir complicaciones. La candidiasis oral no es una condición grave, pero requiere atención médica para evitar que se extienda a otras áreas del cuerpo o cause problemas de alimentación.

El tratamiento de la candidiasis oral en bebés generalmente se realiza con los ya mencionados geles antifúngicos que se aplican directamente en las áreas afectadas de la boca. Estos geles ayudan a eliminar el hongo Candida y aliviar los síntomas asociados, como el dolor y la irritación. Es fundamental completar el curso completo del tratamiento, incluso si los síntomas mejoran antes de lo esperado, para evitar una recaída.

Además del tratamiento médico, los padres deben asegurarse de que todos los objetos que el bebé lleva a la boca estén limpios y desinfectados. Esto incluye chupetes, tetinas y juguetes, que pueden ser fuentes de reinfección si no se mantienen adecuadamente.

Importancia de la higiene bucodental en lactantes

Aunque los bebés todavía no tienen dientes, es importante limpiar su boca regularmente para mantenerla saludable y libre de bacterias y hongos. Los padres deben limpiar la lengua y las encías del bebé con una gasa húmeda después de cada alimentación. Este hábito no solo previene problemas de salud bucal, sino que también prepara al bebé para futuras rutinas de cepillado cuando comiencen a salir los dientes. Fomentar una buena higiene bucodental desde una edad temprana ayudará a establecer hábitos saludables que el bebé mantendrá a lo largo de su vida. Además, reducirá el riesgo de infecciones y otros problemas de salud bucal en el futuro.

Mantenimiento limpio de tetinas y chupetes

El mantenimiento adecuado de tetinas y chupetes es esencial para prevenir la reinfección de candidiasis oral y otras infecciones en los bebés. Estos objetos deben ser limpiados y desinfectados regularmente para asegurar que no se conviertan en un caldo de cultivo para bacterias y hongos. Hay que lavar las tetinas y chupetes con agua caliente y jabón después de cada uso, y desinfectarlos periódicamente hirviéndolos o utilizando un esterilizador.

Este proceso ayudará a eliminar cualquier microorganismo que pueda estar presente y reducir el riesgo de infecciones. Además, es importante reemplazar las tetinas y chupetes desgastados o dañados, ya que las superficies agrietadas pueden albergar bacterias y hongos. Mantener estos objetos en buenas condiciones contribuirá a la salud y bienestar general del bebé.

Puede ocurrir incluso que las lesiones se contagien al pezón materno y aparezca una picazón continua en la areola. Con tratamiento tópico e higiene las lesiones también mejorarán rápidamente.

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