Existen muchas causas por las que un bebé vomita, por eso es importante saber cuáles pueden ser y qué hacer ante los vómitos del bebé.
El vómito es el ascenso desagradable, involuntario y forzoso del alimento ingerido. En los bebés, se deben distinguir los vómitos de la regurgitación. Los bebés a menudo regurgitan pequeñas cantidades mientras comen o poco después, por lo general, mientras eructan. La regurgitación puede ocurrir porque el niño se alimenta rápidamente, traga aire, o es sobrealimentado, pero puede ocurrir sin razón aparente. El vómito habitualmente está causado por un trastorno. Los padres experimentados normalmente pueden detectar la diferencia entre regurgitaciones y vómitos, pero los padres primerizos pueden tener que consultar con un médico o enfermera.

Hablamos de las más habituales y de cuáles son sus causas frecuentes.
Causa del vómito del bebé: Errores dietéticos
Es la causa más común de vómito en los lactantes, ya que es bastante habitual darles más alimento del que pueden tolerar.
Causa del reflujo del bebé: Inmadurez del sistema digestivo
En algunos bebés existe un reflujo gastroesofágico normal, cuya causa es la inmadurez del cardias, una especie de válvula encargada de impedir que la comida que entra en el estómago vuelva hacia el esófago.
Si estos vómitos no son importantes ni afectan al estado nutritivo del niño, no requieren un tratamiento especial.
Durante los primeros meses, lo normal es regurgitar la comida en la primera hora después de haberle dado la toma correspondiente. Si el niño eructa frecuentemente no ocurrirá tan habitualmente. Desaparece según va creciendo el bebé, pero puede extenderse hasta el año.
Causa de los vómitos: Nerviosismo
El niño está intranquilo, duerme poco, llora, vomita...
La medida más importante es que la madre pueda estar tranquila y no se preocupe demasiado por esos vómitos; no suelen tener importancia.
Causa del vómito del bebé: Enfermedad orgánica
A veces tras el vómito se esconde una enfermedad orgánica, como el reflejo gastroesofágico patológico, las gastroenteritis o las intolerancias alimentarias. En estos casos, el vómito suele ir acompañado de otros síntomas.
Causas menos frecuentes
En los recién nacidos y los lactantes, algunas de las causas, aunque menos frecuentes, son importantes, ya que pueden ser potencialmente peligrosas y en algunos casos hasta mortales en el peor de los casos.
El estrechamiento o la obstrucción de la salida del estómago (estenosis pilórica) en los niños de 3 a 6 semanas y esto hay que mirarlo detenidamente.
Una obstrucción del intestino causada por malformaciones congénitas, como la torsión (vólvulo) o estrechamiento (estenosis) del intestino. Otra causa poco común pero especialmente grave.
El deslizamiento de un segmento del intestino dentro de otro (invaginación intestinal) en lactantes de 3 a 36 meses puede ser motivo de vómito.
La intolerancia alimentaria, la alergia a las proteínas de la leche de vaca y ciertos trastornos metabólicos hereditarios poco comunes también pueden causar vómitos en los recién nacidos y lactantes cuando tienen pocos meses.
Por eso, lo primero de todo es ver las causas más comunes, que en la mayoría de los casos es lo que realmente sucederá, y descartadas estas vigilar si esos vómitos se pueden ir por un lado más grave y es necesaria una consulta con el médico.