Cómo utilizar el ruido blanco con bebés

Es un recurso aceptable para tranquilizar a tu bebé, pero los expertos inciden en la importancia de no abusar de ellos.
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Definir qué es ruido blanco no es fácil, pero todo el mundo sabe más o menos qué tipo de ruidos entran dentro de este concepto de moda desde que corrieran como la pólvora su efectividad para calmar y dormir a los bebés. 

En su día, el doctor doctor Sánchez Martínez, del Hospital Vithas Parque San Antonio de Málaga, explicó a Ser Padres que el ruido blanco “es el sonido que contiene todas las frecuencias a una misma potencia”. Su denominación, según el doctor, se debe a que “se comporta como el equivalente visual de la luz blanca, ya que ésta contiene todas las frecuencias de la gama cromática”. 

¿Qué es el ruido blanco?

Para entender bien a qué nos referimos cuando hablamos de ruido blanco, lo mejor son los ejemplos concretos: electrodomésticos como una lavadora lo producen. La psicóloga Marisol Azcona, especialista en suelo y neurodesarrollo infantil, cita también el ventilador, ya que “es un ruido constante y uniforme, contiene todas las frecuencias y estas son de la misma potencia”, asegura.

Es decir, no tienen por qué ser ruidos suaves, sino constantes, sin altabajos y capaces de eliminar el resto de ruidos que existan en ese momento en el entorno. Lógicamente, para dormir un bebé (tampoco un adulto), el sonido de la campana extractora de la cocina no parece lo más recomendable. 

Para este objetivo, se debe buscar un ruido blanco que siga las características descritas anteriormente, pero que no suponga contaminación acústica. Hay aplicaciones de sobra que reproducen distintos tipos de ruido blanco agradables para conciliar el sueño, e incluso las plataformas de televisión y vídeo tipo Netflix o YouTube también los tienen. Incluso aplicaciones musicales han diseñado listas de composiciones musicales que son ruido blanco

Cuándo utilizar el ruido blanco

No es nuestro objetivo recomendarte tipos de ruido blanco para dormir a tu bebé, sino advertirte de que no es recomendable abusar de este recurso. Ya lo hizo en su día el doctor Sánchez Martínez con los lectores de Ser Padres: “no conviene tampoco abusar de estos ruidos para calmar al bebé, ya que puede generar dependencia y que el niño no sea capaz de calmarse solo”, apuntó. Marisol Azcona, por su parte, señala que “La exposición nocturna a largo plazo a los ruidos de muchos decibeles puede perjudicar el oído de los niños”.    

Por este motivo, Azcona proporciona tres claves para saber cuándo y cómo utilizar el ruido blanco para dormir a bebés. Son las siguientes: 

  • Es ideal para los bebés pequeños, pues el sonido simula el vientre materno y eso facilita que tu bebé pueda dormir.⁠
  • Si existe algún ruido dentro de la habitación que puede estar despertando constantemente a tu bebé. (Ronquidos, Perro, vecino, etc) es ideal para enmascarar estos sonidos. ⁠
  • Funciona mucho mejor que la música porque mantiene una misma frecuencia y es “menos interesante” para tu bebé. ⁠

Si está bien elegido el tipo y el motivo de su uso es justificado —bebé que duerme mal, entorno con ruidos molestos, está intranquilo de forma puntual, etc.—, el ruido blanco es un recurso muy interesante. ⁠

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