Las ecografías, ¿son malas para el feto?
Los ginecólogos franceses han emitido un comunicado desaconsejando a las embarazadas realizar por su cuenta ecografías para ver cómo es su hijo.
Todas las futuras mamás realizan tres ecografías a lo largo de la gestación, como indican el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) y cuando es necesario el médico pide alguna más. Estas ecografías son realizas por personal sanitario experto y tienen por lo general una duración inferior a 15 o 20 minutos.
El tiempo que se tarda en realizar una ecografía es importante porque los ultrasonidos aumentan la temperatura corporal de la persona que se somete a la ecografía. Si se sobrepasa la duración recomendada y la prueba no la hace una profesional entrenado para ello, podría tener efectos perjudiciales para el futuro bebé, sobre todo en los primeros meses de gestación.
Las mujeres embarazadas no tienen por qué temer por las ecografías que les recomienda su médico, porque se ha demostrado que ni las dimensionales, ni las ecografías en 4D ni el Doppler color son perjudiciales si el tiempo de exposición no supera el aconsejado. Ahora bien, las futuras mamás no deberían hacer ecografías por su cuenta solo para ver cómo es su hijo, porque estas se suman a las tres o más realizadas con fines médicos y porque podrían hacerlas personas que carecen de la preparación suficiente para manejar ultrasonidos.
Por eso el Colegio de Ginecólogos y Obstetras de Francia, preocupado por el aumento de ecografías que se practican sin un fin diagnóstico, ha emitido un comunicado advirtiendo a las futuras mamás de que estas ecografías que se hacen, según sus palabras, “con un fin lúdico” pueden no ser inocuas para el feto.