Lo del espíritu navideño es estupendo: vivir estas fechas en familia e intentar pasar el máximo tiempo posible juntos haciendo planes y actividades que nos devuelvan, de manera colectiva, a "lo que de verdad importa".
¿Pero qué pasa cuando aún quedan dos semanas de vacaciones y tus hijos ya se han aburrido de calendarios de adviento, películas de Navidad, villancicos y espumillón? Que tenemos dos opciones: o volvernos más creativos con nuestras propuesta lúdicas o claudicar y ser más flexibles con el uso de dispositivos electrónicos que rebajen la cadencia de sus "me aburro" y nos permitan teletrabajar con fluidez.
Yo hoy, en un último intento por conservar el verdadero sentido navideño y no reinstalar Youtube en el televisor, me he sentado y calendarizado cinco actividades que espero que los mantenga motivados y entretenidos en los próximos cinco días.
Por si estás como yo, te las comparto:
- Representación de una obra navideña. ¡Esta es mi gran apuesta! que espero que les mantenga entusiasmados -y ocupados- incluso varios días. Les voy a proponer plantear, ensayar y representar una obra de teatro de temática navideña. Ellos deberán fabricar el atrezzo, diseñar los disfraces, elaborar las entradas y venderlas a familiares y vecinos, así como promocionar su actuación en los grupos de whatsapp de la familia.
- Caza del Tesoro Navideña. Les esconderé pistas y pequeños regalos por la casa que les llevarán, si se las apañan y cooperan, hacia un tesoro definitivo. ¿Cuál? Aún no lo he pensado.
- Diseñar el sitting de Fin de Año. Este año nadie tendrá dudas sobre dónde le toca sentarse o cuáles son sus uvas, porque mis hijos se habrán encargado de elaborar tarjetas para cada comensal en las que indiquen qué lugar ocupan en la mesa.
- Ordenar y limpiar juguetes. Esto es un clásico. Mi madre siempre me lo decía: "¿Cómo crees que los Reyes van a traerte cosas nuevas sino ven que tienes cuidadas las que te trajeron otros años?"
- Lista de propósito de años nuevo. Nunca es demasiado pronto para empezar con tareas de introspección. Les invitaré a pensar en qué han hecho mal o bien este año y en qué pueden mejorar para el próximo.
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