No hay comidas buenas y malas. La falsa creencia de que la pasta es un mal alimento y conviene eliminarlo de la dieta ha estado muy extendida a lo largo de los años. Pero nada más lejos de la realidad. Un plato de pasta, combinado con vegetales y una fuente de proteínas, es una opción ideal para una comida diaria.
Boloñesa de verduras con carne picada, con tiras de pollo y champiñón, o con langostinos salteados. Son opciones que nos encantan ya sea con espaguetis, macarrones o hélices. Además, como la pasta suele ser un plato que gusta mucho a los niños, podemos aprovechar para incluir en ellas más verduras y que las coman con facilidad en un plato que les encante.
En esta ocasión, te proponemos incluir el pescado como proteína principal. En concreto, el salmón ahumado, que al venir preparado te ahorrará mucho tiempo en la cocina. Pruébalo con esta combinación de ingredientes sencilla y deliciosa.
Ficha
Tiempo de preparación min
Tiempo de preparación 45min
Tiempo de cocción 30min
Porciones 2
Tipo de receta (n/a)
Ingredientes
300 g de pasta (preferiblemente tipo fettuccine o tagliatelle)
200 g de salmón ahumado, en trozos
1 taza de crema de leche (nata para cocinar)
1/2 taza de caldo de pescado o caldo de verduras
2 cucharadas de mantequilla
1 cebolla, finamente picada
2 dientes de ajo, picados
Jugo de medio limón
Sal y pimienta al gusto
Perejil fresco, picado (opcional, para decorar)
Queso parmesano rallado (opcional, para espolvorear)
Preparación

1. Cocina la pasta de acuerdo con las instrucciones del paquete en agua con sal hasta que esté al dente. Escúrrela y reserva.
2. En una sartén grande, derrite la mantequilla a fuego medio. Agrega la cebolla y el ajo, y sofríelos hasta que estén tiernos y translúcidos.
3. Agrega el salmón ahumado a la sartén y cocina durante unos dos minutos, revolviendo suavemente.
4. Vierte el caldo de pescado en la sartén y lleva a ebullición. Luego, reduce el fuego a medio-bajo.
5. Vierte la crema de leche en la sartén y cocina a fuego lento durante unos minutos hasta que la mezcla comience a espesar.
6. Exprime el jugo de medio limón sobre la mezcla y revuelve bien. Ajusta el sazón con sal y pimienta al gusto.
7. Agrega la pasta cocida a la sartén y mezcla para que la pasta se impregne con la salsa.
8. Sirve la pasta en platos individuales. Decora con perejil fresco picado y espolvorea con queso parmesano rallado si lo deseas.