Una experta en lactancia materna: "hasta que madre e hijo dominan la lactancia, pueden surgir algunos problemas, pero tienen solución"

Según Pilar Martínez Farmacéutica, consultora acreditada de Lactancia Materna IBCLC, hasta que madre e hijo dominan la lactancia, pueden surgir algunos problemas. "Tienen solución", afirma.

Según Pilar Martínez Farmacéutica, consultora acreditada de Lactancia Materna IBCLC, codirectora del portal de educación en lactancia EDULACTA, y autora de varios libros y guías sobre lactancia, "hasta que madre e hijo dominan la lactancia, pueden surgir algunos problemas". Sin embargo, dice la experta, estos problemas "tienen solución", afirma. En este artículo, la experta profundiza en estos problemas posibles principales problemas con la lactancia materna y su solución. 

La ingurgitación mamaria (hinchazón que suele aparecer en los días que siguen al parto) se alivia con calor húmedo antes de poner al bebé a mamar, frío entre tomas, masajes suaves que ablanden la areola y el pezón y, sobre todo, dando el pecho a menudo para vaciarlo.

Las grietas en el pezón, unas heridas dolorosas que pueden sangrar y que suelen deberse a una mala postura en el agarre, mejoran corrigiendo la postura y dejando el pecho al aire el mayor tiempo posible.

Un bebé mira a su madre - Rubén García
Un bebé mira a su madre - Rubén García

El vaciado insuficiente del pecho puede producir una obstrucción mamaria (conducto bloqueado) que se manifiesta con un bulto doloroso en el pecho y piel enrojecida. La mejor forma de resolverlo es poner al bebé a mamar lo más a menudo posible en el pecho obstruido para conseguir que drene, o colocarle de forma que su barbilla toque el bulto doloroso. Así, mientras mama hace un masaje que ayuda al drenaje

También va bien hacer movimientos suaves de peinado (con un peine de cerdas gordas) desde la parte más alejada del pezón hacia el centro. Es más efectivo si se realiza en la ducha con agua caliente.

Un recién nacido y su madre - Rubén García
Un recién nacido y su madre - Rubén García

La mastitis, "la molestia más frecuente y dolorosa"

La mastitis (te contamos más en esta pieza sobre la mastitis durante la lactancia: ¿qué es y cómo tratarla?) es probablemente la molestia más frecuente y dolorosa

La leche materna contiene muchos tipos de bacterias conviviendo sin ningún problema, pero en ocasiones se produce una disbiosis (alteración del equilibrio bacteriano) que provoca una infección. Esto puede ocasionar dolor en el pecho, pinchazos, síntomas como de gripe, fiebre e incluso la sensación de que disminuye de producción de leche. Mejora con la extracción de la leche (mamando o con sacaleches), descanso y en caso necesario, analgésicos antiinflamatorios y antibióticos.

Retrato de una madre con su bebé - Rubén García
Retrato de una madre con su bebé - Rubén García

Posibles problemas en el destete definitivo

¿Y qué pasa con el destete? Cuando más felices están con su lactancia, muchas madres empiezan a temer la vuelta a trabajo: "¿Qué ocurrirá cuando ya no pueda dar el pecho a demanda? ¿Cómo reaccionarán mis pechos?", se preguntan.

Si la madre puede sacarse la leche en el trabajo, no suele haber problemas. Pero cuando hay que eliminar algunas tomas (la lactancia en casos especiales), es mejor acostumbrarse a la nueva producción un poquito antes. 

El pecho se autorregula y se va a adaptar a lo que le digamos (amamantar solo por la noche, amamantar por la mañana y por la noche, amamantar solo por la tarde...), pero conviene hacerlo progresivamente para evitar obstrucciones y dolor. 

Cuando llegue el momento del destete definitivo, hay que procurar hacerlo poco a poco y con muchísima paciencia. "Si los pechos duelen es porque estamos eliminando las tomas demasiado de golpe y el pecho no está pudiendo adaptar la producción de leche a lo que le pedimos", concluye la experta

En este otro artículo seguimos profundizando en los problemas durante la lactancia materna.

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