Convivimos con la música acompañada con gestos desde que somos bebés. Nuestras abuelas nos hacían “Los cinco lobitos” y otras tantas canciones infantiles que son universales. Pero no solo captan la atención de los niños pequeños los gestos y la música, es que también juegan un papel importante en el desarrollo de las habilidades motoras y habilidades lingüísticas. Es decir, son divertidas, hipnóticas porque captan su atención pero, además, les aportan beneficios reales a los más pequeños.
Acerca de esto se ha escrito mucho durante décadas. No es algo que venga de ahora, de hace tres días, como se suele decir. Sí es verdad que la divulgación que hacen sobre el recurso rimas con movimiento la pedagoga, maestra, logopeda y terapeuta Tamara Chubarovsky y otras muchas divulgadoras de cuestiones relacionadas con la crianza y la educación en las redes sociales ayuda a que se hable y se conozca más acerca de ello.
Chubarovsky aborda la cuestión de las rimas con movimiento y los beneficios que estas tienen en los peques a través de numerosos textos escritos y en los talleres que imparte sobre ello. “Las Rimas con Movimiento mantienen esta unidad entre imagen, gesto y sonido. Esta concordancia entre lenguaje, contenido y movimiento; sentimiento, pensamiento y acción, ofrece además a los niños, sentido de unidad, seguridad, confianza y serenidad”, señala.
No es un descubrimiento actual
Explica la especialista que “Las rimas y juegos infantiles son y siempre fueron una fuente de alegría, diversión y encuentro entre adultos y niños”, pero que investigadores como Rudolf Steiner ya descubrieron detalles acerca de su impacto que en la actualidad se han podido constatar a través de la neuroeducación, que ha permitido conocer en profundidad el cerebro de los más pequeños. “La neurología y los neurolingüísticos actuales han descubierto que los niños que no pueden realizar ciertos movimientos, tampoco pueden producir ciertos sonidos, corroborando así la relación entre desarrollo del movimiento y desarrollo del lenguaje de la que ya hablaba Rudolf Steiner hace 100 años”, expone.
Tamara Chubarovsky destaca que “Las rimas y juegos infantiles de movimiento promueven el desarrollo físico y sensorial, el lenguaje y la comunicación, la capacidad de atención, concentración, memoria, imitación”. Dicho de forma resumida, añade la pedagoga, “promueven aquellas facultades imprescindibles para el aprendizaje cognitivo y para el despliegue de la vida afectiva”.
Lo que se consigue trabajando con los niños actividades lúdicas de rimas con movimiento es que adquieran una serie de patrones de movimientos maduros, tal y como los describe Chubarovsky, que son esenciales para un correcto desarrollo emocional y para que se produzca un aprendizaje académico efectivo. “Esto significa: reflejos primarios inhibidos, lateralización correcta, buena integración sensorial, coordinación visomotora, etc”.
A esto hay añade Tamara Chubarovsky la cuestión del movimiento como pilar del desarrollo del lenguaje. “El lenguaje es la motricidad fina de los órganos de fonación”. Por ello, concluye la maestra, si sumamos las virtudes derivadas del control del movimiento a las virtudes de un lenguaje correcto, los beneficios para los peques son enormes y estos se entremezclan en las denominadas rimas con movimiento, que pueden ser juegos de dedos, como los citados cinco lobitos, o con todo el cuerpo.
“Coonstituyen una verdadera joya y regalo para el desarrollo infantil, ya que además de estimular el lenguaje y el movimiento, por su carácter lúdico, alegre y rítmico-sonoro, respetan la integridad del niño: no aceleran el proceso intelectual, le permiten ser niño, divertirse y jugar”, concluye sobre las rimas con movimiento Tamara Chubarovsky.