Un nuevo estudio preliminar de una universidad norteamericana recién publicado confirma que el humor es una herramienta de crianza muy efectiva para fortalecer el vínculo familiar entre padres e hijos. Y es que esta investigación, de la que te hablamos a continuación, ha demostrado que los padres que recurren al humor en la crianza tienen mejor relación con sus hijos e hijas.
Ya sabíamos que el humor y la inteligencia en los niños están relacionados, pero ahora sabemos que, según nuevo estudio Investigadores de la facultad de Medicina de Penn State, el humor sirve para fortalecer el vínculo entre padres e hijos. En un estudio piloto recién publicado titulado ‘El humor en la crianza de los hijos: ¿tiene algún papel?’, los científicos han profundizado en cómo afecta el humor en la relación entre padres e hijos con la intención de conocer si era cierta o no esa percepción general de que el humor mejora las relaciones familiares.

Los investigadores, que están ampliando el trabajo en la actualidad, encuestaron a 312 personas de 18 a 45 años. De ellos, más de la mitad afirmaron haber sido criados por padres que recurrían al humor y el 71,8% de los mismos confirmaron que el humor es una herramienta eficaz para la crianza de los hijos. De hecho, la mayoría asegura que utiliza o planea utilizar el humor con sus hijos e hijas porque creen que tiene más beneficios potenciales que posibles daños.
Por otro lado, el equipo de investigadores ha hallado una correlación del uso del humor por parte de los padres y cómo se sentían las personas encuestadas en relación a sus progenitores. “De aquellos que informaron que tenían una buena relación con sus padres, el 63% dijo que sus padres usaban el humor, mientras que el 3,7% dijo que sus padres no lo usaban”, apuntan desde la universidad de Penn State. “De aquellos que informaron que pensaban que sus padres hacían un buen trabajo criándolos, el 68,4% dijo que sus padres usaban el humor, mientras que el 5,6% dijo que sus padres no lo usaban”, añade.
Estos datos, explica Benjamin Levi, principal investigador del estudio, y profesor de pediatría y humanidades en la Facultad de Medicina de Penn State, explican que “el humor puede enseñar a las personas flexibilidad cognitiva, aliviar el estrés y promover la resolución creativa de problemas y la resiliencia”. Viene a decir el profesor de otro modo que el humor, a poder ser inteligente, es clave para los niños y para el ambiente familiar.

Relación entre las relaciones familiares y laborales
Para los investigadores, el estudio preliminar ayudará a entender cómo usar el humor de forma constructiva en determinadas situaciones puede ser un recurso positivo y en qué contextos es más peligroso usarlo.
En este sentido, establecen similitudes entre las relaciones personales, a nivel familiar, y las relaciones laborales. Lucy Emery, residente de pediatría en el hospital infantil de Boston y estudiante de la facultad de Medicina de Penn State durante el estudio, incide en que existe “un interesante paralelismo entre los negocios y la crianza de los hijos, que son ambos jerárquicos”. Añadiríamos un matiz a esta afirmación: la jerarquía, en la crianza, varía en función del tipo de crianza que se ejerza, siendo mayores las consecuencias (negativas) de los distintos tipos de crianza basada en el miedo.

En relación con esto último, dice Emery que en los negocios “se ha demostrado que el humor ayuda a reducir las jerarquías, crear mejores entornos para la colaboración y la creatividad y disipar la tensión”, y si bien reconoce que las relaciones entre padres e hijos son más afectuosas que las laborales, como durante la crianza existen situaciones de un nivel de estrés similar, “el humor puede ayudar a disipar esa tensión y jerarquía y ayudar a que ambas partes se sientan mejor ante una situación estresante”, afirma Emery.
Al investigador principal del estudio, Benjamin Levi, le ha sorprendido la diferencia entre los dos grandes grupos de personas encuestadas para la investigación. El objetivo de Levi y su equipo es ahondar más en esta cuestión para tener una fotografía más amplia y diversa sobre cómo afecta el humor en la crianza, además de recopilas más información cualitativa basada en experiencias reales de crianza en las que se utilice el humor como herramienta.
“Mi esperanza es que las personas puedan aprender a usar el humor como una herramienta eficaz para la crianza de los hijos, no solo para disipar la tensión sino también para desarrollar resiliencia y flexibilidad cognitiva y emocional en sí mismas y modelarlas para sus hijos”, concluye Benjamin Levi.