Contenedores de pañales: cómo funcionan y por qué deberías tener uno con la llegada de un bebé
Los contenedores de pañales son una solución práctica y necesaria para no acumular pañales sucios en la papelera y evitar malos olores en casa
Con la llegada de un recién nacido es habitual que las papeleras de casa comiencen a llenarse de una cantidad generosa de pañales sucios cada día, suponiendo un problema de malos olores y acumulación de bolsas de basura. Según advierte Ecoembes, los pañales no son reciclables, por lo que deberemos desechar los que están sucios en el contenedor gris (o contenedor de restos). Este es el container adecuado para depositar lo que no podemos tirar en cualquier otro contenedor, es decir, son residuos que no se reciclan, pero que tampoco pueden usarse para hacer compost.
Una alternativa muy útil para tener en casa, es disponer de un contenedor de pañales. Como su propio nombre indica, es una basura anti-olor especialmente fabricada para depositar los pañales en el hogar. Eso sí, a la hora de tirar esta basura, deberá ir al contenedor gris igualmente. No estamos hablando de un simple cubo de basura más, sino uno específico para esta función que nos ayuda a hacer el día a día más fácil con un bebé en casa. Veamos qué es exactamente y cuáles son los mejores del mercado.
¿Qué son los contenedores de pañales?
Son unos cubos de basura específicos para pañales que llevan incorporados mecanismos para sellar y absorber los olores desagradables que desprenden. Al ser un objeto patentado, garantiza su capacidad de aislamiento, emisión de malos olores y transmisión de gérmenes.
Aunque no es una herramienta imprescindible y se puede seguir usando el cubo de toda la vida, sí que es cierto que si sois sensibles a los malos olores y os gusta que el ambiente de vuestro hogar esté limpio y fresco es una solución más que recomendable.

¿Cómo funcionan?
Estos contenedores de basura especiales disponen de una tapa que, cuando se abre, activa un mecanismo que sella el pañal dentro de la bolsa que contiene el cubo. Generalmente, es un anillo giratorio con perilla que envuelve la bolsa alrededor del pañal y lo bloquea para evitar la proliferación de gérmenes, bacterias y olores. Una vez sellado, hay que empujar el residuo ya sellado o usar la propia tapa abatible para ello.
Recambios: ¿qué tipo de bolsas debemos usar?
Por lo general, cada modelo de contenedor de pañales requiere un tipo de bolsa específica. Lo hacen así para generar fidelidad hacia la marca y obligar en cierta manera a que compres únicamente los recambios con ellos. El plus que ofrecen sus bolsas es que suelen tener características antibacterianas. Estos repuestos originales tienen la desventaja de tener un precio más elevado, pero se gana en comodidad, ya que se amoldan perfectamente al tamaño y mecanismo de su cubo. Si quieres ahorrar algo de dinero, se pueden comprar recambios que sean compatibles con tu contenedor.
También existen contenedores de pañales que permiten utilizar bolsas de basura al uso, aunque es preferible que estas sean de buena calidad para evitar que se rompan en el interior. Al igual que los anteriores, suelen tener cierres herméticos que impiden la salida de malos olores y un funcionamiento sencillo para depositar el pañal y meterlo al cubo girando un asa o la propia tapa.
¿Qué debemos tener en cuenta?
Uno de los puntos en los que hay que fijarse es la cubierta, que deberá ser resistente y difícil de abrir por los niños. La facilidad de uso también es otro factor importante, deberá ser sencillo para un adulto y complicado para los más pequeños. Podemos encontrar modelos que tienen un sistema que separan los pañales y los envuelven de forma individual para evitar el mal olor. Además, también existen otros diseños más sofisticados con filtros de aire, revestimientos perfumados y otros medios para eliminar el olor.
Por lo demás, las deferencias son sutiles de unos modelos a otros, todo dependerá de vuestros gustos y necesidades en cuanto a capacidad, diseño, color, el tipo de bolsas que necesitan o el precio que os supone esta compra con recambios incluidos.

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¿Dónde los colocamos?
La mayoría de las personas tienen los cubos de basura en una zona cerrada de la cocina, sin embargo, estos contenedores de pañales se pueden poner perfectamente en la habitación del bebé sin ningún problema. Por lo general, deberían estar al lado del cambiador para poder tirarlo inmediatamente después del cambio de pañal, sin necesidad de estar llevándolo de un lado a otro de la casa y esparciendo en mal olor por todos los rincones.
A simple vista, parece un cubo normal con una tapa, quizás más grande que una papelera del baño. La capacidad varía según el modelo, pero puede ser capaz de recoger aproximadamente entre 10 y 20 pañales sucios en su interior. Si quieres una mayor capacidad, también existen diseños más grandes.
¿Cada cuánto hay que vaciar el cubo?
Habrá que vaciar la cubeta una vez alcanzado el límite permitido que figurará en las instrucciones de cada modelo. Por lo general, cada dos días sería un tiempo razonable, lo que supone no hacerlo más de tres veces a la semana. Como hemos puntualizado al comienzo, se deberán echar estos residuos al contenedor gris.