Si tus peques acaban de empezar con las sumas y las restas, seguro que no te vendrán mal unos cuantos trucos y métodos que les ayuden a hacerles ver lo divertidas que pueden llegar a ser las mates. En este artículo, exploraremos cómo integrar el aprendizaje emocional y curricular en casa y cómo utilizar trucos para aprender a sumar y restar.
Importancia de integrar el aprendizaje emocional y curricular en casa
Cuando los niños comienzan a enfrentarse a las sumas y restas, puede ser un reto. Sin embargo, con un enfoque adecuado y algunas actividades creativas, el aprendizaje de las matemáticas puede convertirse en una experiencia divertida.
Reforzando el aprendizaje de matemáticas en el hogar
Son muchos los padres que tienden a separar el aprendizaje y conocimiento curricular del que se produce en el hogar. Caen en el error de que del primero solamente están encargados los docentes en la escuela y que ellos solamente deben preocuparse de las emociones, las rabietas y el saber estar del pequeño. Pero nada más lejos de la realidad, igual que lo segundo también se enseña en el colegio, lo primero ha de enseñarse y reforzarse en casa.
No se trata de ser un experto, sino de mostrar interés y disposición para aprender juntos. Al hacerlo, los niños perciben las matemáticas como una actividad compartida y no como una carga individual, lo que puede aumentar su motivación. Además, integrar el aprendizaje de matemáticas en actividades cotidianas, como cocinar o hacer compras, puede ayudar a los niños a ver la aplicación práctica de los números.
Superando la resistencia hacia las matemáticas
Sabemos que una de las materias que más animadversión causa en los niños son las matemáticas y todas las que tienen que ver con el cálculo. Esto se debe, tal y como demostró algún estudio científico, principalmente a la herencia adquirida por ellos: si en casa no paran de escuchar que eso es difícil, que a nosotros no nos gustaban de pequeños, que tendrán que poner mucho más hincapié para no traer un suspenso u otras cuestiones relacionadas, estarán preparados para rechazarlas en el momento en el que se dibuje un número en la pizarra de clase. Por eso, los expertos educativos dan el mismo consejo que con el aprendizaje de otras asignaturas: la mejor manera de aprender matemáticas es a través del juego.

Aprender matemáticas a través del juego
Y es que el proceso lúdico es el mejor vehículo de aprendizaje de los niños. Es su manera intrínseca de adquirir conocimiento de todo tipo, así que deberíamos tenerlo en cuenta también a la hora de enseñarles materias del currículo.
Ejemplos de trucos divertidos para sumar y restar
Un ejemplo clásico es el uso de juegos de cartas. Se pueden crear cartas con diferentes operaciones matemáticas y pedir a los niños que encuentren el resultado correcto. Otro truco divertido es el uso de rompecabezas matemáticos. Estos pueden incluir sumas y restas que los niños deben resolver para completar el rompecabezas. Además, los juegos de mesa que incorporan matemáticas pueden ser una buena manera de practicar sumas y restas. Juegos como el dominó o el bingo de números pueden adaptarse para incluir operaciones matemáticas, haciendo que el aprendizaje sea parte de un juego emocionante. ¡Estos trucos para aprender a sumar y restar serán todo un éxito!
Uso de dibujos y pegatinas
Los dibujos y pegatinas son recursos visuales que pueden hacer que las matemáticas sean más accesibles. Una actividad sencilla es dibujar figuras con un número determinado de elementos, como dientes o estrellas, y usar pegatinas para añadir o quitar elementos, representando así sumas y restas.
Basta con hacer distintos dibujos de caras con un número variado de dientes en cada una de ellas. Pintamos o tapamos los que queramos restar del total. Podemos usar pegatinas para quitar y poner o simplemente poner los folios en fundas de plástico y usar rotuladores de pizarra blanca que se puedan borrar. Para niños de seis años es perfecto ya que es muy ilustrativo.
Otra opción es crear un mural o póster de matemáticas en casa. Los niños pueden participar en la creación de este mural, que puede incluir dibujos, pegatinas y números. A medida que resuelven sumas y restas, pueden añadir o quitar elementos del mural, lo que les permite ver su progreso.
Manzanas como herramientas de aprendizaje
¡A contar manzanas! Los niños pueden contar las manzanas, añadir más o quitar algunas, para practicar sumas y restas de manera tangible. Este enfoque práctico ayuda a los niños a conectar los números con objetos reales, lo que facilita su comprensión. hacer esta ficha necesitamos: cartulinas para hacer el árbol, bolitas de distintos colores (en este caso amarillo y rojo, que serán las manzanas) y dos dados.
Es fácil: se tira un dado, que se pondrá en la primera casilla vacía del tronco del árbol. Lo mismo con el segundo dado. El niño o niña tiene que poner tantas manzanas rojas en el árbol como números del primer dado, y amarillas del segundo dado. Después cuenta el resultado y lo pone en la tira de resultados del tronco.

Actividades prácticas para enseñar a sumar y restar
Otras actividades que os pueden ayudar en casa con las sumas y las restas.
Creación y uso de cartas con sumas y restas
Para hacer esta actividad se pueden utilizar cartas de diferentes colores o formas. Consiste Los niños pueden agrupar las cartas por colores o formas, lo que añade un elemento de clasificación y organización al juego. Esta actividad también puede adaptarse para incluir multiplicaciones o divisiones, proporcionando un desafío adicional para los niños más avanzados.
Actividades con pinzas y tarjetas
Las pinzas y tarjetas son herramientas simples pero efectivas para enseñar sumas y restas. Se pueden crear tarjetas con diferentes operaciones matemáticas y pedir a los niños que usen pinzas para colocar el número correcto en cada tarjeta. Esta forma de jugar también es muy sencilla. Tenemos que preparar cartas, en las que pintemos las cuentas que queramos que hagan los peques. Valen sumas, restas e incluso si os animáis, multiplicaciones. Por otro lado, 10 pinzas de la ropa. Las pegamos una pegatina con un número, que será el que usen de resultados. Después solo queda sacar las cartas y colocar la pinza dónde coincida.
El método de la máquina con bolitas de papel
El método de la máquina con bolitas de papel es una actividad creativa que ayuda a los niños a visualizar sumas y restas. Se pueden crear máquinas de cartón con diferentes compartimentos y pedir a los niños que coloquen bolitas de papel en cada compartimento para representar números. Luego, pueden añadir o quitar bolitas para realizar operaciones matemáticas. No hace falta complicarse, se puede hacer simplemente dos vasitos en los que añadir las bolitas y luego vaciarlos manualmente para contar el resultado.
Uso de los dedos y cuentas de fieltro
Se pueden crear manos y pedir a los niños que levanten o bajen los dedos para representar números. Luego, pueden añadir o quitar cuentas para realizar operaciones matemáticas.
Introducción del ábaco como herramienta
El ábaco nos da posibilidades infinitas. Un método muy antiguo con el que los niños más pequeños podrán empezar a entender las sumas y las restas a través del juego. Pide que dejen dos cuentas de color azul a la izquierda y que dejen tres rojas también a la izquierda. ¿Cuántas cuentas habrá en total? Tendrán que adivinarlo poniendo las verdes a la izquierda también.
Aprender con una huevera y botones
Para llevar a cabo este truco de sumar y restar necesitaréis una huevera y unos cuantos botones (o legumbres). Apuntaréis cada número del 1 al 12 en cada uno de los orificios de la huevera y, a continuación, pediréis al peque que introduzca en cada uno el número de botones que corresponde. Después podéis pedirle que saque un número determinado de cada orificio y los introduzca en otro y así ya estará restando. O que cambie uno de un orificio a otro para que reste.
Golosinas como método lúdico para practicar restas
Otro truco muy sencillo y al que seguro no dirán que no es al de comer aquello que más les gusta. Ponle, por ejemplo, cinco golosinas (o chocolatinas, o frutas que le gusten…) delante. Ahora pídele que cuente el total y que, después, se coma una. Cuando lo haya hecho, tendrá que volver a contar. Ahí estará restando. Se puede hacer como juego en la merienda.

Enseñar a sumar y restar a diferentes edades
Enseñar a sumar y restar a niños de primaria requiere un enfoque estructurado y adaptado a su nivel de desarrollo.
Estrategias para enseñar a sumar y restar a niños de primaria
Una estrategia efectiva es utilizar juegos de mesa que incorporen operaciones matemáticas (pueden ser simplemente juegos de cartas tradicionales como el chinchón). Otra estrategia es utilizar actividades prácticas que conecten las matemáticas con la vida diaria. Por ejemplo, se pueden utilizar situaciones cotidianas, como hacer compras o cocinar, para enseñar sumas y restas de manera práctica.
Cómo enseñar a sumar a un niño de 5 años
Enseñar a sumar a un niño de 5 años requiere un enfoque lúdico y visual. Es importante utilizar actividades que sean apropiadas para su edad e introducir objetos cotidianos, como juguetes o alimentos, para representar números y realizar operaciones matemáticas. ¡Naturalidad ante todo! Además, los juegos de cartas o rompecabezas pueden adaptarse para incluir diferentes niveles de dificultad, lo que permite a los niños progresar a su propio ritmo.
Aprender a sumar niños de 6 años
La diferencia entre los 5 y los 6 años no es mucha, pero al dar el salto a primaria ya podemos empezar a utilizar herramientas escritas.