Si no se dan estos casos (mantener relaciones sexuales o tener alguna patología concreta) la media de edad para visitar al ginecólogo por primera vez, en España, ronda los 20 años.
Muchas jóvenes retrasan su primera cita con el ginecólogo por miedo a que sea dolorosa, por lo que es necesario desmentir que la exploración ginecológica genere dolor. Si bien es cierto que la paciente notará molestias durante la realización de la prueba, para nada supone un hecho traumático ni doloroso.
Cabe hacer hincapié, por tanto, en la importancia de acudir regularmente al ginecólogo. La primera visita siempre será la más insegura y difícil de afrontar, debido también a la edad temprana de la paciente, pero es necesario acudir para confirmar el buen estado del aparato genital y evitar el desarrollo de cualquier patología ginecológica.
Para facilitar la primera visita al ginecólogo de tu hija planteamos una serie de pautas que pueden ayudarle:
- La primera visita al ginecólogo servirá para iniciar el historial clínico de la paciente, teniendo en cuenta su edad, salud ginecológica y la revisión realizada (en caso de que se decida hacerla).
- Es importante acudir al ginecólogo tranquila, pensando que es algo común y habitual. El doctor es un profesional acostumbrado a atender a chicas o mujeres.
- Se debe hacer las preguntas necesarias sobre todos los temas que puedan generar duda (por ejemplo, las relaciones sexuales); no hay que tener vergüenza al hacerlo, el ginecólogo es quien mejor puede aconsejar e informar de todo.
- Una revisión ginecológica temprana puede detectar de manera precoz si existe alguna patología o anomalía en el aparato reproductor femenino. Cuanto antes se detecte el problema, antes se podrá solucionar.
- La revisión ginecológica consiste en explorar los genitales femeninos internos y externos. Normalmente se realiza una citología para valorar el cuello del útero.
- Además de controlar el buen desarrollo del aparato genital, el ginecólogo deberá revisar las mamas de la paciente para detectar si existen bultos o signos alarmantes.
- No se recomienda acudir al ginecólogo en los días de menstruación, ya que esto dificulta el análisis.
- Actualmente, las revisiones ginecológicas se realizan cada tres años a no ser que existan problemas. En casos concretos que necesiten algún tipo de seguimiento será el propio especialista quien marque el calendario de citas.
- Lo más positivo de acudir al ginecólogo, especialmente por primera vez, es la tranquilidad que aporta el saber que estás sana y que, en caso de que se detecte alguna anomalía siempre jugará a favor esa localización precoz. Además, comentar aspectos de la salud femenina con un profesional puede ayudar a tener más conocimiento de tu propio cuerpo y detectar de forma precozmente problemas.
En muchas ocasiones las pacientes se sienten cohibidas o avergonzadas a la hora de tratar determinados temas con su ginecólogo, por ello, además de acudir a consulta con una buena disposición y tranquilidad, es importante elegir a un doctor que transmita confianza y empatía, que sienta que le escucha y que pretende ayudarle en todo momento. No responder sinceramente a las preguntas planteadas por el doctor sólo le perjudicará a ella misma, como paciente, así que es mejor que sea lo más franca posible para tratar de encontrar la mejor solución a lo que le pase.
Escrito por el Dr. José Mª Fernández Moya, Director Médico del Instituto de Medicina EGR. Ginecología y obstetricia Madrid