Las vacaciones de verano son el momento perfecto para relajarnos, para disfrutar en familia y para pasar tiempo de calidad mientras reforzamos los vínculos con los hijos. Tanto si vosotros, como familia, os vais a ir de vacaciones fuera de casa como sino, los planes para no aburrirse son prácticamente infinitos.
Sin embargo, queremos dirigirnos a aquellas familias cansadas de los típicos planes veraniego (ir una semana a la playa o a la montaña, intentar soportar el calor de la ciudad en un centro comercial o sin salir de casa por miedo a separarse del aire acondicionado,…). Para ellas hemos preparado un montón de planes diferentes, que los niños no olvidarán nunca y que les ayudarán tanto a seguir educando a sus hijos como a establecer lazos familiares (aún) más fuertes.
Los niños olvidan los regalos materiales, pero no las experiencias
Buscar planes para hacer en familia, sea en la estación del año que sea, es muy importante para el desarrollo infantil. Y es que, un estudio liderado por la Universidad de Oxford determinó que los niños aumentan su inteligencia y su felicidad cuando les regalan experiencias en vez de regalos materiales.
Es la misma conclusión a la que llegó hace poco tiempo también un profesor asociado a la Universidad de Harvard.
Planes diferentes para hacer con niños en verano
Teniendo en cuenta que el calor aprieta y seguirá haciendo en los próximos dos meses, que el tiempo para hacer planes es mucho y que las experiencias aumentan la felicidad y la inteligencia infantil, hemos seleccionado un montón de planes veraniegos para hacer en familia y que no son los mismos de siempre.
JUGATTOPIA
¿Recuerdas los campamentos de verano a los que íbamos cuando éramos pequeños y que todavía pueden disfrutar nuestros hijos? Bien, pues JUGATTOPIA es un campamento que se puede disfrutar en familia.
Este plan familiar propone una estancia de entre cinco y seis noches en el entorno junto al Pantano de Sau, en el Parc Natural de les Guilleries i Collsacabra, en Cataluña. El alojamiento se puede elegir. Existen tres posibilidades: habitación privada con baño o compartida, alquilar una tienda glamping, ir a un camping con tu tienda de campaña o llevar una furgo cámper para situarla entre los prados y el bosque.
Además del alojamiento, el precio permite incluir pensión completa y, por supuesto, todos los planes y los espectáculos que la organización ha preparado.
Hay un espacio de juego libre para trabajar con juegos de madera artesana y reciclada, talleres de magia, un taller para trabajar juntos la creatividad libre, otro con pintura tribal, un taller de paseos sensoriales en el bosque para volver a conectar con la naturaleza e, incluso, visitas guiadas por el pantano y el parque.
Los papás, a su vez, podrán disfrutar de un grupo de crianza para poner en común dudas y reflexiones con otros padres, un taller de clown para reírse sin parar o una charla impartida por Inma Marín para entender por qué el juego es tan importante en la infancia.
Una experiencia de surfski
Es cierto que para llevar a cabo este plan es necesario vivir o desplazarse hasta un lugar con playa o con algún pantano donde se lleve a cabo esta actividad. Pero, si tenéis la oportunidad, podéis disfrutar mucho el mar desde otra perspectiva.
Haciendo un curso de surfski: un deporte con tintes de piragüismo en el que el kayak abierto es el principal protagonista. A diferencia del kayak tradicional, lleva un pedal de pie con el que se controla el timón.
Un deporte que podréis practicar, por ejemplo, en aguas canarias, con los servicios de la empresa Livingsea, especializada en la enseñanza de este deporte.
La Anjana y sus amigos
Otro campamento pensado para todas las familias, pero esta vez entre montaña y costa cantábricas. En concreto, el plan se sitúa en el Parque Natural de las marismas de Santoña, Victoria y Joyel.
También incluye dos opciones de alojamiento en pensión completa: en un dúplex para cuatro personas o en cabañas amplias con baño compartido.
Visitar el pueblo de los abuelos
Sabemos que es un plan muy recurrente hace unos años pero que cada vez pierde más fuerza. Por eso, recomendamos dejar que nuestros hijos disfruten de las raíces que también llevan en sus venas y que se impregnen de la naturaleza y la vida de los pueblos en verano.
Da igual si no tenéis un alojamiento familiar donde quedaros, seguro que podéis alquilar algunos para disfrutar de la estancia durante algunos días.
Una partida de bolos y una tarde de cine
Si vivís en la ciudad o cerca de alguna de ellas y vuestro presupuesto es más ajustado, podéis ceñiros a alguno de todos los planes urbanos que se ofrecen durante la época estival.
Nosotros os proponemos una tarde muy entretenida: acercaros hasta X-Madrid (si vivís cerca de aquí) a la zona de Ozone Bowling, donde podréis disfrutar de una partida de bolos, coches de choque, tómbolas y hasta un gran recreativo.
Después, desplazaros hasta el Ocine Urban para disfrutar de alguno de los últimos estrenos en los cines.
