Falta tan solo un día para que dé comienzo una de las noches más mágicas del año: la Noche de San Juan. Una fecha cargada de tradiciones y secretos y rodeada de mucha magia que conviene celebrar con los más pequeños.
Pero, antes de pasar a los planes, vamos a explicar de dónde viene la tradición de celebrar la noche del 24 de junio. Todo apunta a que, en sus orígenes, era una tradición pagana que más tarde la religión se encargó de hacerla cristiana.
Según narran algunas tradiciones, la noche del 23 al 24 de junio da por finalizado el solsticio de verano que comienza dos días antes: concretamente, la noche del 20 al 21 de junio. Durante estas tres noches, el Sol se mantiene casi en la misma posición con respeto a la Tierra, por lo que el atardecer y el amanecer se dan justo a la misma hora, sin apenas variaciones. Coincide, además, con las tres noches más cortas y los tres días más largos de los 365 días del año. Dando comienzo, de esta manera, la temporada estival.
A partir de la noche de San Juan, los días van disminuyendo su luz y las noches haciéndose más largas hasta llegar, el 21 de diciembre, al solsticio de invierno: cuando el proceso se volverá a la inversa.
Casi todas las celebraciones de la noche de San Juan tienen un elemento común: el fuego. Es típico en muchos lugares del mundo encender hogueras pero, ¿por qué? Se cree que es una práctica ancestral: se encienden fogatas con la intención de dar fuerza al Sol quien, a partir de esa noche, comenzará a perder luz hasta llegar a diciembre. Además, el fuego también tiene una función ‘purificadora’ para quien lo contempla.
En la tradición cristiana, con la celebración de San Juan se conmemora el nacimiento de San Juan Bautista, justo seis meses antes del nacimiento de Jesús (el 24 de diciembre).
Podemos aprovechar esta noche tan cargada de magia para hacer algunos planes con niños. Planes que inaugurarán el verano y que no olvidarán nunca. La diversión y el significado de estos planes es inversamente proporcional al dinero que os costarán: apenas nada.

Haced una corona de flores
Algunas tradiciones marcan que la noche de San Juan hay que hacer una corona de flores, ponérsela y, después, guardarla debajo de la almohada. A la mañana siguiente, habremos de coger la corona con sumo cuidado y tirarla a algún río o al mar pidiendo un deseo y cerrando fuerte los ojos. ¿Se cumplirá?

Montad una pequeña hoguera
Las hogueras son una de las señas de identidad de la noche de San Juan así que, si no podéis desplazaros hasta las hogueras famosas de San Juan, en Alicante, o a las que se hacen en Galicia, podéis crear la vuestra en vuestro jardín, terraza o en algún sitio cercano a casa.
Jugad a bailar alrededor de ella, quemando todas las energías negativas.

Saltando la hoguera
La tradición marca que hay que saltar encima de la hoguera pidiendo un deseo en el salto. Eso sí, si vais a hacerlo con niño hacedlo con muchísimo cuidado: que la hoguera sea lo suficientemente pequeña como para que puedan hacerlo sin miedo a lastimarse.

Quemando deseos
Otro de las tradiciones típicas de San Juan es escribir deseos en un papel y quemarlos en la hoguera. O, al revés: escribir en un papel todas las cosas que queremos suprimir de nuestra vida y dejar que la hoguera lo consuma para que se cumpla.

Barquito de vela
Una tradición muy bonita y fácil de hacer: en un vaso de agua cascar un huevo crudo, pedir un deseo y dejarlo toda la noche. Si a la mañana siguiente la clara del huevo, al mezclarse con el agua, tiene forma de barquito de vela, supuestamente el deseo se cumplirá a lo largo del año. ¿Será así?

Mirar a las estrellas
Siempre es una buena ocasión para observar el firmamento, así que la magia de la noche de San Juan puede hacer de este plan algo mucho más especial.

Bañaos en alguna fuente
Si no tenéis cerca el mar, alguna fuente también sirve para darse ese baño.

Una cucaña
En algunos pueblos se celebra esta tradición organizando un montón de juegos infantiles al caer el sol: juegos con globos de agua, cucañas para niños, pilla-pilla… ¿por qué no os unís aunque sea en vuestro jardín?

Acercaos a alguna verbena (si hay)
Parece que la campaña de vacunación permite que cada vez se celebren más fiestas populares y las famosas verbenas. Si cerca de vuestra casa tenéis constancia de que se celebrará alguna por San Juan, puede ser una buenísima oportunidad para acercarse y disfrutar con seguridad.

¿Tenéis playa cerca?
Si tenéis cerca el mar, la noche de San Juan es una buena oportunidad para bañarse a la luz de la luna (siempre con supervisión adulta infinita) y pedir, mientras tanto, un deseo.
