Son muchas las familias que, cada final de curso (especialmente a final de cada etapa) hacen un regalo al profesor de su hijo con el objetivo de expresarle la gratitud y el aprecio por su dedicación y enseñanza. Si el regalo es personalizado, además, muestra que has invertido tiempo y esfuerzo en pensar en el profe de manera individual, lo cual le hará sentir más especial y valorado.

¿Es importante hacer un regalo a los profesores al terminar el curso? No se trata de una decisión de vital importancia, pero sí un detalle para reconocer el papel fundamental que desempeña su figura en la vida de tu hijo y, por ende, en la tuya propia. Y es que, los maestros dedican su tiempo y energía para educar y guiar a los niños, y un regalo muestra que tú, como padre o madre, estás agradecido por ello.
A sabiendas de que en apenas unas semanas terminará el presente curso escolar y de que serán muchas las familias que estarán pensando ideas de regalos para el profe de su peque, hemos elaborado una lista muy completa de regalos personalizados. Algunos se pueden encargar y otros, si cabe, son más especiales porque los niños (con un poquito de ayuda) deberán hacerlos con sus propias manos.
Ideas de regalos personalizados para profesores
Vamos con algunas ideas de regalos que aunque son personalizados, os costarán poco trabajo porque directamente se pueden encargar para que los envíen hechos a casa (o a donde prefiráis):
- Una taza personalizada con el nombre del profesor y alguna de estas frases que les dedicamos especialmente a ellos
- Un llavero con una plaquita en la que aparezcan los nombres de todos los niños de su clase escritos del propio puño y letra de cada niño
- Un marco de fotos con una imagen del niño y del profesor juntos
- Una pulsera con la misma plaquita que el llavero
- Un cuento personalizado con el nombre del profesor en el que él sea el protagonista y sus alumnos los personajes secundarios
- Un puzle con una foto personalizada en la que aparezca el niño o la clase entera junto a él
- Una lista de reproducción con sus canciones favoritas y un regalo en forma de voz del niño
- Este es muy básico, pero suele hacer mucha ilusión: un portafotos con una foto especial que no haya visto en todo el curso
- Una bolsa de tela personalizada con una frase de agradecimiento por todo lo que ha hecho
- Botella de aluminio en la que plasméis la huella de la mano del niño (hay tiendas que se encargan de hacerlo)
- Una joyita personalizada (collar, pulsera, pendientes,…)
- Un Funko personalizado con sus facciones (hay tiendas que se encargan de hacerlos)
- Una caja llena de sus chucherías favoritas
- Una carta escrita por el niño (con ayuda del adulto)
- Un cuaderno con una portada original y personalizada
- Un marcapáginas de madera en el que coloquéis alguna frase de agradecimiento
- Un colgante en el que aparezca el nombre de todos los niños de la clase con una frase de agradecimiento detrás
- Una agenda personalizada para que el curso que viene se siga acordando de todos
- Un diploma al mejor profe del año
- Un set personalizado con material escolar (tijeras, una regla de madera, un set de bolígrafo y lapicero,…)
Manualidades para regalar a profesores a final de curso
El regalo número 21 se lo hemos dedicado a los detalles que más ilusión hacen a los profesores: las manualidades que los niños hacen con sus propias manos. A continuación te proponemos cinco de lo más especiales.
- Un llavero de plástico con la huella de la mano del niño
Para hacer este llavero tendréis que conseguir una placa de plástico especial para horno. Este plástico mágico tiene el ‘poder’ de encoger su tamaño y quedarse muy rígido y resistente cuando le aplicamos tan solo dos minutos de calor del horno.
¿Cómo hacerlo? Primero plasmaréis la huella del niño (o de los niños) en el plástico y la recortaréis. Después, una vez que hayáis hecho un agujero para la anilla del llavero, lo pasaréis por el horno durante un minuto (o según instrucciones del fabricante).
¡Y listo!
- Una taza personalizada con nuestras manos
Para decorar la taza bastará con hacerse con un pack de rotuladores permanentes y dejar que los niños echen a volar su imaginación mientras la decoran.
- Un minicactus eterno

Esta manualidad es la que más nos gusta de todas. ¿Os acordáis del ‘anipompón’? Ese tierno animal hecho con pompones de lana. Aquí tenéis el paso a paso:
Siguiendo ese paso a paso para hacer los pompones podéis conseguir el cactus. La diferencia está en que solo haréis una o dos bolitas y las pegaréis con un poco de silicona caliente en una mini maceta (las hay en cualquier bazar).
Podéis colgar una tarjeta de agradecimiento para que quede más mono.
- Un cuadro con las huellas dactilares de todos los niños

En este cuadro, con un arsenal de globos, aparecen las huellas dactilares de todos los peques de la clase: cada globo es una de ellas. Nunca lo olvidará.
- Un florero eterno

Siguiendo con la idea del cactus, esta vez cada niño es una flor. Bastará con que os hagáis con un florero de lata como el de la foto, un trocito de material verde donde se pinchan las flores artificiales, unos cuantos palillos largos y cartulinas de colores.
Recortáis cada cartulina en forma de flor y pegáis en el centro la foto de cada niño. Después, las pincharéis todas dentro del florero y ¡listo!