Un pregunta muy frecuente en aquellas mujeres cuyo primer parto finalizó mediante la realización de una cesárea es: ¿Si me quedo embarazada de nuevo, mi parto será igualmente por cesárea?. Pues lo primero y más importe que hay que tener en cuenta es que el motivador el cual se debió realizar la cesárea, es el principal condicionante para la repetición de la cesárea o no en el siguiente embarazo.

En principio no será necesaria, si la cesárea fue algo "accidental", algo que no se podía prever de entrada Duante el transcurso del embarazo: porque el bebé venía de nalgas, se produjo un desprendimiento de placenta o el parto no progresaba adecuadamente y se observó pérdida de bienestar fetal etc. En estos casos, las condiciones no tienen por qué repetirse en un siguiente parto.
La cesárea si será necesaria, si persiste la misma causa que motivó la primera, por ejemplo: placenta previa, anomalías en el cuello uterino o enfermedades de la madre, que desaconsejen el parto vaginal, como ciertas cardiopatías, defectos visuales o alteraciones neurológicas que contraindican los pujos maternos, o defectos uterinos que pudieran aumentar el riesgo de rotura uterina si se deja evolucionar el trabajo espontáneo natural del parto.
Se abre por la misma cicatriz
Siempre que sea posible, se vuelve a abrir por el mismo lugar donde está la cicatriz de la cesárea antigua. Sólo en casos excepcionales (como por ejemplo, que se hayan producido adherencias intestinales), se procede a hacer una nueva incisión en una localización diferente. Es decir, si el acceso es dificultoso por la misma zona de útero donde se incidió previamente en la cesárea anterior, se procede a realizar una incisión en una localización diferente y así facilitar tanto la cirugía en sí como la salida del bebé. No obstante, la cicatriza a nivel de la piel, es siempre la misma ; el acceso cutáneo siempre es en la misma localización.
No se debe provocar el parto
Cuando ha habido una cesárea, hay profesionales que no suelen ser partidarios de provocar el parto por el riesgo de que se abra la cicatriz durante las contracciones y prefieren realizar una segunda intervención si el parto se retrasa y no se presenta de forma natural. Esto no es lo recomendado actualmente. Si se cumplen condiciones aptas para poder intentar parto vaginal tras una cesárea, se debe intentar de entrada un parto. Siempre que hayan transcurrido más de 18 meses desde la cesárea previa, se puede intentar un parto pues el riesgo de rotura, aunque existente, es muy bajo.
No obstante, la evidencia y las guías no recomiendan esta práctica de entrada. Lo recomendado es intentar parto de forma natural dejando evolucionar de forma espontánea. en caso de que haya que inducir, siempre debemos intentar lograr dinámica con la mínima dosis de oxitocina posible, y con un buen control de monitor de la madre y del bebe.