El avance de la inteligencia artificial en medicina está transformando la forma en que se detectan y previenen complicaciones durante el parto. A través del análisis automatizado de datos fisiológicos, hoy es posible identificar signos de sufrimiento fetal en tiempo real, facilitando decisiones clínicas oportunas. Esta tecnología no reemplaza al personal médico, pero actúa como una herramienta que amplifica sus capacidades.
Uno de los mayores beneficios de estos sistemas es su capacidad para operar en entornos con alta carga asistencial, donde una sola partera o matrona debe atender a múltiples pacientes. En este tipo de contextos, el monitoreo continuo suele verse limitado por falta de personal o recursos.
La IA puede realizar una primera interpretación de las señales del bebé, como la frecuencia cardíaca, alertando ante patrones anormales.
La intervención temprana es clave para prevenir muertes por asfixia o hipoxia durante el parto, así como para evitar daños neurológicos en el recién nacido. Un sistema automatizado de monitoreo fetal no se cansa, no se distrae y puede funcionar de forma constante, reduciendo el margen de error humano y mejorando la seguridad del binomio madre-hijo.

Resultados alentadores en el uso clínico de IA para monitoreo fetal
Un estudio publicado en el British Journal of Obstetrics and Gynecology evaluó los efectos del monitoreo fetal aumentado por IA en la prevención de muertes intraparto y neonatales tempranas. El sistema, conocido como AI-CEFM, fue desarrollado por la empresa PeriGen Inc., y ya se utiliza en hospitales de Estados Unidos. Esta fue la primera vez que se desplegó en un entorno clínico de bajos ingresos.
Durante el estudio se observó una reducción de aproximadamente el 75% en muertes intraparto y neonatales tempranas, comparando los seis meses previos y posteriores a la implementación del sistema. Este impacto se logró sin un aumento significativo en las intervenciones quirúrgicas, aunque hubo un leve incremento en las cesáreas justificadas por detección oportuna de riesgo fetal.
La tecnología analiza la frecuencia cardíaca fetal en tiempo real y detecta patrones compatibles con hipoxia o acidosis, condiciones que pueden derivar en la muerte del bebé o daños irreversibles si no se actúa a tiempo.
Al generar alertas automáticas, el sistema permite intervenciones rápidas por parte del personal médico o de enfermería.
Potencial de la IA en salud materna en contextos de bajos recursos
El caso de éxito documentado en Malawi demuestra que la IA puede ser implementada con éxito incluso en sistemas sanitarios limitados, donde las parteras deben atender a decenas de mujeres a la vez y los recursos de monitoreo fetal son escasos. La iniciativa se llevó a cabo en el Hospital Comunitario del Área 25, en la capital Lilongwe, con el apoyo de la Facultad de Medicina de Baylor y el Hospital de Niños de Texas.
En este hospital se atienden hasta 8.000 partos anuales, y antes del proyecto, las muertes por parto o en las primeras horas de vida eran frecuentes. El sistema AI-CEFM permitió monitorear a múltiples pacientes en simultáneo con un menor esfuerzo del personal, garantizando una respuesta adecuada en los casos críticos. Según las autoridades locales, esto no habría sido posible sin la automatización que ofrece la inteligencia artificial.
Este despliegue marca un precedente importante para otras regiones del mundo que enfrentan condiciones similares, como otras partes del África subsahariana, zonas rurales de Asia y América Latina. La clave está en adaptar la tecnología al contexto, capacitar al personal y mantener un enfoque centrado en la mejora de la calidad asistencial.

Transformar la atención obstétrica con tecnología accesible y eficaz
El monitoreo fetal tradicional requiere formación especializada y atención constante, lo cual es difícil de lograr en muchos centros de salud con escasos recursos.
La IA ofrece una solución viable al interpretar los datos en tiempo real, liberar carga cognitiva al personal y permitir que una sola partera supervise varios embarazos a la vez sin comprometer la seguridad.
Tener la confianza de que el sistema está vigilando activamente la salud fetal genera tranquilidad en salas de parto saturadas, donde los errores pueden tener consecuencias fatales. Esta tranquilidad no solo mejora la experiencia del parto para las mujeres, sino que también aumenta la efectividad de las decisiones clínicas.
Adoptar tecnologías basadas en IA puede ser una de las estrategias más efectivas para reducir la mortalidad perinatal, especialmente en los países con menos capacidad de atención.
La experiencia en Malawi, impulsada por la colaboración internacional y el respaldo del UNFPA, muestra cómo la innovación puede integrarse de manera exitosa en programas de salud materna global.

Una oportunidad para salvar vidas con ayuda de la IA
Los resultados del estudio demuestran que la inteligencia artificial puede convertirse en una herramienta clave para mejorar los resultados obstétricos en todo el mundo.
Su uso no depende solo de la infraestructura, sino también de la voluntad política, el financiamiento sostenido y la capacitación del personal.
La combinación de monitoreo continuo, algoritmos predictivos y decisiones clínicas informadas permite prevenir muertes evitables que hasta hoy eran parte de la estadística silenciosa en muchos hospitales.
Con iniciativas como esta, la inteligencia artificial no solo mejora la tecnología médica, sino que también promueve la equidad en el acceso a la atención de calidad.
Referencias
- Chiweza C, Iwuh I, Hasan A, Malata A, Belfort M, Wilkinson J. Can artificial intelligence-augmented fetal monitoring prevent intrapartum stillbirth and neonatal death in a low-income setting? An observational study. BJOG. (2022). doi:10.1111/1471-0528.17321