Mitos de la crianza muy extendidos que son totalmente incorrectos
Aunque hay muchos mitos sobre la crianza que se han extendido culturalmente a lo largo de las generaciones, no solo son incorrectos, sino que pueden ser perjudiciales para los niños.
Como en casi todos los ámbitos de la vida, se han dicho muchas cosas sobre la crianza. Muchas que la ciencia, con el paso de los años, se ha encargado de ratificar o desmentir por completo. Algunas, aunque están bien desmentidas, siguen corriendo como la pólvora de boca en boca. Han dado lugar a mitos sobre la crianza que tomamos, todavía hoy, como ciertos y que, sin embargo, deberíamos olvidar de inmediato si no queremos hacer daño a nuestros hijos.
Casi todos giran en torno a los cuidados o a su salud, así que no estamos hablando de cualquier cosa.
Seguro que más de una o uno de vosotros se siente identificado con situaciones en las que su madre o su suegra le ha dado un consejo sobre la alimentación o la crianza de su bebé que, cuanto menos, pueden resultar chocantes. Probablemente otras personas hayan recibido ese comentario de su padre, su suegro, los cuñados u otros familiares, que de caer en mitos no se salva casi nadie. Por tanto, inserta en el titular el parentesco familiar que quieras, ya que encaja para todos los casos.
Algunos son más raros, como asegurar que poniendo un hilo rojo sobre la frente del bebé se consigue detener el hipo y otros mucho más extendidos y populares, tomados casi como verdades absolutas, como afirmar que si el niño se ha resfriado es porque ha andado descalzo o porque hace frío. Muchos de vosotros también os habéis encontrado pidiéndole a la abuelita o el abuelito por décima vez que no cocine con vino el guiso que va a comer su nieto ante su oposición, ya que “el alcohol se evapora al cocinar”. Pero, ¿qué hay de cierto en todos ellos? Y sobre todo, ¿cómo argumentamos que se trata solo de mitos y tratamos de convencer a la abuela o al familiar de turno?
A continuación repasamos algunos de los mitos de crianza más populares y explicamos por qué no son ciertos, todo poniendo un poquito de humor, que así todo se lleva mejor. ¡Coge ideas y argumenta tus respuestas las veces que sea necesario!
mitos sobre la crianza que son falsosFuente: iStock
'Si le rapas el pelo al bebé, crecerá más fuerte'
Este es uno de los grandes mitos y seguro que más de una se lo ha escuchado alguna vez a su suegra. La cantidad y calidad del pelo viene determinada en gran parte por los genes y rapar la cabeza del bebé no hará que le salga más fuerte, su aspecto definitivo no dependerá de que lo hagamos. El pelo con el que nace se renovará en los siguientes meses.
'No cojas tanto al bebé que se va a acostumbrar a los brazos'
'Si cocinas con alcohol, se evapora, no pasa nada porque tomen esa comida'
¿Tienes la misma conversación con tu suegra una y otra vez porque se empeña en cocinar con alcohol comida que van a tomar los niños porque dice que se evapora? Pues tendrás que volver a repetírselo, porque no, no se recomienda cocinar con alcohol si la comida la van a tomar niños, ya que el alcohol no se evapora del todo al cocinar: según corrobora un estudio de la universidad de Idaho de Estados Unidos "es necesario cocinar a fuego medio dos horas y media el alcohol para que este se reduzca al 5 %". Por otro lado, los datos afirman que la técnica del flambeado retiene el 75 % del alcohol y el horneado un 45 %”.
'Se va a resfriar por ir tan poco abrigado'
No. Ni por ir poco abrigado ni por ir descalzo, por lo que llevar al niño envuelto como una cebolla no es garantía contra el resfriado. Los resfriados se producen por virus, es decir, si el niño se resfría es porque ha estado en contacto con otra persona que esté resfriada. Tal y como explica Lucía, mi pediatra en su blog: “las infecciones respiratorias, catarros, gripes y resfriados comunes se transmiten de persona a persona a través de las gotitas de saliva que emitimos al hablar o a través de nuestras manos”. Es cierto que el frío favorece que haya más virus catarrales, pero cuando una persona se resfría es por contagio.
'La salida de los dientes provoca fiebre'
Otro de los mitos más extendidos es que la salida de los dientes produce fiebre y no es así. Cuando salen los dientes el niño puede sentir malestar y molestias pero no debemos entender la fiebre como una consecuencia de la dentición: “Si vuestro hijo tiene temperaturas persistentemente superiores a 38ºC no debemos escudarnos en los dientes, debemos buscar otro origen” explica Lucía, mi pediatra en su blog.
'No pasa nada porque el recién nacido beba un poco de agua'
A los recién nacidos no se les debe dar agua, la hidratación necesaria la obtienen de la leche. Al bebé se le empieza a ofrecer agua a partir del inicio de la alimentación complementaria, alrededor de los 6 meses. Según la Organización Mundial de la Salud no se debe dar agua al bebé antes porque se le pone «en riesgo de diarrea y desnutrición», ya que «el agua puede estar contaminada y causar infecciones». También hay que tener en cuenta que dar agua a un recién nacido «puede causar que el bebé consuma menos leche materna o suspenda la lactancia».
'La leche de vaca produce más mocos'
Otra de las frases preferidas de muchas abuelas es “no le des leche de vaca, que va a tener muchos mocos” y no, la leche de vaca no produce mocos. “Existen numerosos estudios científicos que demuestran que la leche no solo no produce mocos, ni bronquitis, sino que es un alimento de los alimentos fundamentales de la dieta de un niño en su primera infancia” explica Lucía, mi pediatra en su blog.
'Si tiene hipo, ponle un hilo rojo en la frente'
Esto también es un clásico de muchas abuelas y no, por ponerle un hilo rojo en la frente a un niño o niña no se frena el hipo. El hipo se produce porque el diafragma se contrae de manera brusca y empuja el aire en los pulmones. Esto provoca el cierre de las cuerdas vocales y por ello se emite el característico sonido. Poco tiene que ver el hipo con la piel o la frente…
Apúntate a nuestra newsletter para estar al tanto de todas nuestras novedades